sábado. 20.04.2024

El Ayuntamiento de Santander ha puesto a disposición de la Fiscalía "nuevas pruebas" relacionadas con el incendio del Museo de Arte Moderno de Santander y Cantabria (MAS) sucedido el pasado 20 de noviembre, según ha anunciado este viernes la alcaldesa, Gema Igual.

"Cuando hay un percance, de oficio, se manda (la información) a Fiscalía. La Fiscalía no vio indicios y lo archivó, pero para el Ayuntamiento el expediente está vivo porque tenemos en nuestro conocimiento nuevas pruebas", ha explicado la regidora a preguntas de la prensa.

Igual ha precisado que los Servicios Jurídicos municipales han estimado que el caso debe volver a los juzgados. "No vemos ninguna razón para no enviarlo", ha apostillado.

La alcaldesa ha recordado que ya se abrió un expediente en la Fiscalía como consecuencia del "trámite habitual" realizado por la Policía Local.

"Ya hay un expediente abierto en Fiscalía, porque se abrió porque es el trámite habitual de la Policía Local, y como no tenemos nada que esconder, estimamos que si nuestro expediente sigue abierto y hay nuevas pruebas, han de ponerse en conocimiento de la Fiscalía", ha insistido Igual.

Este jueves el Ayuntamiento explicó en un comunicado que se aprecian "contradicciones" entre los informes presentados por las empresas que realizaban trabajos en el Museo cuando tuvo lugar el incendio en el edificio.

El Consistorio informó que, una vez que los informes aportados por SIEC, empresa responsable de los trabajos de accesibilidad, y Codelse, compañía que se encargaba del mantenimiento de los sistemas de seguridad, han sido analizados por parte de la arquitecta municipal y el responsable del departamento municipal de Ingeniería Industrial se ha entregado la documentación a los grupos municipales.

Estos nuevos informes técnicos "ratifican que SIEC debía ejecutar la obra con las instalaciones en funcionamiento y que Codelse en ningún caso informó de la desprotección del edificio".

Esta información se añade así al expediente con todos los documentos recabados por el Ayuntamiento que ahora se remitirá al juzgado para depurar las eventuales responsabilidades que pudieran derivarse de lo acontecido.

Igualmente, se enviarán los informes a las compañías aseguradoras que están elaborando sus informes periciales mediante tres peritos externos, para determinar la causa, el origen y cotejar daños y procedimientos.

Entre las "evidencias y contradicciones" que el Ayuntamiento reseña a la vista de los informes de SIEC y Codelse está que la empresa encargada de la seguridad del museo acredita que el sistema antiincendios funcionaba correctamente en abril, al inicio de las obras, mientras que SIEC "insinúa" en su informe que el Ayuntamiento debió adoptar medidas extraordinarias de seguridad durante la ejecución de las obras.

Esta afirmación de SIEC es, a su juicio, algo "contradictorio" a las afirmaciones que esta misma empresa realiza y en las que deja claro que su intervención en la zona de obra no debería haber afectado al resto de las instalaciones del museo.

Además, y aunque en algún momento pudiera haberse barajado la opción de complementar las medidas de seguridad existentes en el edificio, este hecho "no justificaría", según el Ayuntamiento, que SIEC o Codelse procedieran a desmantelar el sistema de seguridad del museo.

También se "contradicen", según indica el Ayuntamiento, las empresas respecto a las actuaciones realizadas en los sistemas de seguridad ya que SIEC afirma que mantuvo siempre operativos los sistemas antirrobo y "en ningún momento procedió a desmantelar las centralitas de seguridad", mientras que Coldelse señala que ambas centrales (robo e incendios) "dejaron de prestar servicio en el mes de junio".

El contraste entre los dos informes pone en evidencia además que SIEC era "absolutamente consciente" de que la seguridad del museo debía permanecer activa durante las obras, contratando a Codelse para este fin.

En su informe, SIEC afirma que no ha intervenido en ningún momento en las centralitas, siendo Codelse la única que lo hacía, pero Codelse señala que el 8 de junio y tras atender un aviso de SIEC para retirar elementos de las instalaciones de seguridad, llega al museo y observa que la central de detección de incendios está desconectada y por tanto inoperativa "en una operación ajena a Codelse".

El Ayuntamiento presenta ante la Fiscalía “nuevas pruebas” sobre el incendio del MAS