Carlos Slim, sexto empresario más rico del mundo, deberá declarar como testigo en un juicio por despido promovido por el exabogado de FCC Aqualia en Cantabria, Guillermo Nalda.
Tal y como escribe Consuelo de la Peña en El Diario Montañés, el magnate mexicano, máximo accionista de la compañía, decidió despedir al letrado al traspasar todos los asuntos judiciales a un despacho de abogados de ámbito internacional, según afirma él mismo.
El Juzgado de lo Social número 4 ha tomado esta decisión después de que Nalda solicitase el interrogatorio de Slim en su demanda. El juicio está previsto para el 22 de enero de 2018. Según publica El Diario Montañés, si el empresario no comparece, sin una causa justificada, los hechos denunciados se declararán como ciertos.
El juicio está previsto para el 22 de enero de 2018
A pesar de esto, los expertos jurídicos consideran “remota” la presencia de Carlos Slim en este juicio, y creen que lo más probable es que sus abogados impidan que tenga que acudir a declarar.
Guillermo Nalda, quien asegura en su demanda que ha trabajado para Aqualia durante ocho años, pide que se condene a la empresa y que su despido se declare improcedente.
Aunque en este tiempo “la prestación laboral se ha venido desarrollando en virtud de sucesivos contratos aparentes de arrendamiento de servicios” impuestos por la compañía, Nalda defiende que la realidad es que “se trata de una relación laboral” en toda regla.
Además, el denunciante considera que se trata de “una contratación personal” y que el trabajo ha sido llevado a cabo únicamente por él y “no por un despacho de abogados”. También que “nunca ha actuado como un letrado en ejercicio o asesor externo”, sino bajo las órdenes del director gerente del Servicio de Santander.
Además, afirma que su única actividad laboral por cuenta ajena es para Aqualia, la Federación Cántabra de Fútbol y la Delegación de la Mutualidad.
