sábado. 20.04.2024

La preocupación por la corrupción subió tres puntos en la encuesta del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) del mes de febrero, hecho en los días del juicio a la trama valenciana de responsables de Gürtel, pero también aumenta la inquietud por la sanidad y por las pensiones.

En concreto, la corrupción y el fraude aparece citada como un problema principal de España en el 38,7% de los cuestionarios, sólo superada por el paro, que sigue en cabeza con un 65,5%. La inquietud por la sanidad se anota un 12,7% y adelanta a la independencia de Cataluña como quinto problema del país.

Así figura en el Barómetro de Febrero del CIS, basado en 2.486 entrevistas realizadas en 253 municipios de 47 provincias en los primeros doce días de febrero, unas fechas en las que, además de la crisis política de Cataluña, copaban las portadas los ecos de las confesiones de Álvaro Pérez 'El Bigotes' y Ricardo Costa en el juicio de la trama valenciana de Gürtel y el cabecilla de la trama, Francisco Correa, comparecía ante el Congreso.

De ahí que subieran tres 3,6 puntos las menciones a la corrupción y el fraude como uno de los problemas principales de España, pasando del 35,1% de enero al 38,7% de febrero, la cifra más alta desde el pasado verano.

Eso sí, el paro sigue como el primer problema del país con un 65,5%, un porcentaje similar de los meses anteriores. Su cifra más baja de los últimos años se registró precisamente en noviembre de 2017 con un 65,1%.

CLASE POLÍTICA

Como tercer problema los españoles citan mayoritariamente a la clase política, con un 24,2%, una cifra muy parecida a la del mes anterior (24,3%). Este asunto llegó a marcar un 27% hace un año y un 29,5% en octubre de 2016.

Los problemas económicos caen a la cuarta posición con un 21,8%, mientras que la sanidad pasa a ocupar la quinta plaza marcando un 12,7%, su porcentaje más alta del último año (en febrero de 2017 fue récord con un 13,9%).

El aumento de la preocupación por la sanidad desplaza a la crisis catalana, que ahora aparece en el 11,3% de los cuestionarios, cinco puntos por debajo de lo registrado el mes anterior (16,7%) y lejos del récord del 29% que marcó en octubre de 2017, en los días del referéndum secesionista, cuando llegó a ser el segundo problema del país. 

Ya más atrás los encuestados citan los problemas de índole social (8,9%), la calidad del empleo (8,5%) y las pensiones, que un asunto que suben 3,2 puntos en un mes y que con un 8% se consolida entre los diez problemas principales del país.

ECONOMÍA

Ahora bien, si a los encuestados se les pregunta cuáles son los problemas que personalmente le afectan más, ya no aparece la corrupción ni Cataluña, sino que las principales respuestas se centran en la economía: el paro, con un 33,6%; los problemas de índole económica (21,1%), y las pensiones (12,4%). En cuarto lugar figura la sanidad con un 11,9%, seguido de los problemas relacionados con la calidad del empleo (11,4%) y ya después la corrupción (11,3%).

En cuanto a la opinión de los encuestados sobre la situación económica, aún hay un 54,1% que la considera "mala" o "muy mala", frente a solo un 5,6% que la elogia, pero al menos son más los que opinan que mejorará el año que viene (23% por un 18,9% que cree que empeorará).

En el caso de la situación política, la visión es más negativa: un 70,4% la considera "mala" o "muy mala" frente a un 3,6% que la ve bien, y encima un 39,6% cree que está peor que hace un año y los que piensan que empeorará dentro de un año son el doble respecto a quienes opinan que mejorará (26,2% por un 13,3%).

Crece la preocupación por la corrupción