sábado. 20.04.2024

La cabina de la Grúa de Piedra ha vuelto este jueves a su lugar original en el Muelle de Albareda junto al nuevo Centro Botín. Y lo ha hecho rodeada de expectación por propios y extraños. Menos de cuatro meses después de que se retirara a finales de enero de este mismo año, la estructura ha sido instalada y vuelve a formar parte del paisaje más tradicional de Santander, tras una operación de “rehabilitación total y en profundidad” que ha llevado a cabo la Autoridad Portuaria de la capital cántabra.

Su renovado aspecto invita a olvidar los motivos por los que fue desmontada en primer lugar. En febrero del pasado año 2016, una parte del contrapeso de la Grúa de Piedra se desprendió y cayó sobre un contenedor-oficina de la obra del Centro Botín. No causó heridos, pero el accidente llevó a la APS a desmontar la otra parte del contrapeso y la pluma de carga, llevándoselas para restaurar y dejando sólo la cabina sobre la base de la Grúa.

Un momento del montaje de la Grúa de Piedra

De 14 metros de altura y 30 toneladas de peso, la histórica Grúa de Piedra fue proyectada por Sheldon y Gerdtzen y construida en 1896 dentro de un plan de mejoras de la Costa Norte pero también con cierta urgencia, pues la falta de capacidad del puerto de Santander para descargar bultos de más de tres toneladas estaba haciendo que muchos buques tuvieran que acabar dirigiéndose a otros puertos, principalmente al de Bilbao.

Cuando se proyectaron las obras del Centro Botín, hubo poderosos sectores que abogaron por la retirada de la Grúa para dejar espacio al nuevo proyecto, pero la presión popular logró que acabara siendo el propio Centro Botín el que tuviera que moverse unos metros de su ubicación prevista, para dejar espacio a la Grúa de Piedra. La cabina de la histórica estructura se va, pues, pero para volver.

La Grúa de Piedra ya vuelve a formar parte del paisaje de Santander. Foto: Ángel Sainz

La Grúa de Piedra regresa a su lugar