viernes. 29.03.2024

Tras el esperpéntico partido disputado por el Racing en Barakaldo en la pasada jornada, los verdiblancos afrontaban este domingo la visita de la Sociedad Deportiva Amorebieta con un ambiente crispado tras la dura derrota sufrida hace siete días.

Tal fue la magnitud de los hechos, que esta misma semana Borja Granero y Dani Aquino, dos de los jugadores estrella del equipo, decidían cerrar sus cuentas de Instagram tras los incidentes con los aficionados al término del partido.  

De esta manera, el equipo comandado por Carlos Pouso debía conseguir sí o sí una victoria con la que mantener viva la esperanza de permanecer en los puestos de playoff. El técnico verdiblanco ha presentado un once inicial con alguna que otra sorpresa, como el descarte final del capitán Granero, que ha tenido que ver el partido desde la grada en el último momento.

Carlos Pouso decidía descartar de la convocatoria a Borja Granero minutos antes del partido

Con la ya habitual formación 4-3-3, el técnico vasco ha decidido dejar a Regalón en el banquillo después de su actuación frente al Barakaldo y ha recuperado para el once inicial a Antonio Tomás tras cumplir su sanción.

La delantera titular del Racing ha sido la que más cambios ha experimentado, después de que Aquino viese la quinta amarilla la jornada pasada y tras la lesión en la muñeca sufrida por Héber, que le tendrá apartado de los terrenos de juego durante varias semanas. Así, Borja Lázaro, Pau Miguélez y Óscar, que ha vuelto tras una lesión, han ocupado los puestos delanteros al inicio del partido.

El dominio verdiblanco ha sido patente durante toda la primera parte, jugando con el balón y encontrando espacios en la defensa rival, aunque los jugadores no han terminado de materializar sus oportunidades.

Por su parte, la SD Amorebieta ha intentado frenar los ataques locales a base de faltas, algo que ha hecho que el juego fuese algo trabado durante los primeros instantes de partido.

La ocasión más clara de los racinguistas ha estado protagonizado por Borja Lázaro, cuyo remate al primer palo en el minuto 10 de partido era sacado por Jon Tena con una espectacular mano.

Pau Miguélez tuvo otra en el 24, después de driblar a dos defensas y caer derribado dentro del área, en una jugada polémica por la que los jugadores del Racing, y El Sardinero al unísono, reclamaban penalti.

Los jugadores de Amorebieta tuvieron algún acercamiento tímido y sin mucho peligro, que no puso en aprietos al guardameta Iván Crespo durante los 45 minutos de la primera mitad.

Tras el descanso, los de Pouso salieron con garra y ofrecieron quince minutos de juego intenso que se materializaron con dos zarpazos en dos minutos. El primer tanto de los verdiblancos llegaba en el 57 tras un dispare lejano de Quique Rivero que desvió la zaga visitante y que despisto a Tena. Borja Lázaro hacía el segundo en el 58 tras un remate de cabeza que se coló en el fondo de la portería.

No volvió a moverse el marcador, a pesar de que los santanderinos estuvieron cerca de ampliar la ventaja en varias ocasiones.

Victoria obligada del Racing, que derrotó con solvencia a su rival y continúa cuarto en la clasificación con 54 puntos.

Una victoria necesaria y obligada