Muchas mujeres se han encontrado encerradas con sus maltratadores en una situación de vulnerabilidad e incertidumbre. Los datos, comparados con 2019, que arrojan los distintos organismos públicos en cuanto a la Violencia de Género evidencian un incremento sobresaliente en los “gritos de auxilio”.
Las estrategias de la derecha hablando de “violencia doméstica” quitando la perspectiva de género o plantear diferencias entre abuso y violación, quieren crear la idea de problemas individuales y encerrarnos de nuevo en nuestras casas donde estamos solas, cuestionando a las víctimas de violencia de género.
Es la oportunidad de visibilizar como la alianza entre el patriarcado y el capitalismo produce violencia, una violencia insoportable. Es la oportunidad de demostrar y defender en la calle que nuestra sociedad puede ser igualitaria, requisito indispensable para ser democrática y libre.