jueves. 25.04.2024

No hubo asesinatos ni homicidios dolosos, pero sí robos en domicilios. Muchos robos, o al menos más que en 2015. En concreto, unos tres al día durante todo 2016. Según datos del Ministerio del Interior difundidos este martes, se produjeron en Cantabria 984 robos con fuerza, lo que representa un 34,2% más frente a los 733 que se produjeron en 2015. Sin embargo, estos datos oficiales no son fiables para Ciudadanos, cuyo diputado autonómico, Juan Ramón Carrancio, ha acusado al delegado del Gobierno en Cantabria, Ramón Ruiz, de “falsear las estadísticas en esta materia”.

Según ha explicado Carrancio, “cuando se produce un robo y se desconoce su autor no se contabiliza”, dejando entrever que la cifra final de estos delitos sería muy superior a la emitida por el Ministerio. Es por esto que ha exigido a Ruiz que actúe y tome medidas para reducir y evitar los robos en las viviendas de la Comunidad.

"El delegado del Gobierno nos vende que Cantabria es una Comunidad segura y se dedica a hacer propaganda y a mirar para otro lado, cuando el incremento de los robos en viviendas es una realidad en diferentes municipios", ha denunciado en un comunicado.

Según ha explicado Carrancio, “cuando se produce un robo y se desconoce su autor no se contabiliza”

Para Carrancio, "seguramente el asunto se empezará a tomar en serio cuando suceda una desgracia personal irreparable", y ha recordado que ha pedido más medios humanos y materiales para la Guardia Civil. Asimismo, ha insistido en que se cumplan las ratios del decreto regional de 1,5 agentes por cada 1.000 habitantes en diversos municipios de Cantabria, "donde precisamente están sufriendo una oleada de robos".

La formación naranja ha indicado al respecto que la Guardia Civil da cobertura a 100 de los 102 regionales con la única ayuda de los "escasos" policías locales en los municipios que disponen de ellos y teniendo en cuenta que, debido a lo reducido de su plantilla, "no pueden ofrecer un servicio las 24 horas a sus vecinos".

Sin contar la Agrupación de Tráfico, existen 50 vehículos con una antigüedad menor de cinco años, 112 entre cinco y diez, 103 con más de diez años y de estos 265 coches, solo se renuevan diez este año. "Si a ello le añadimos que disponen de un parque móvil envejecido, muy baqueteado en algunos casos y con varios cientos de miles de kilómetros a sus espaldas, el cuadro resulta desolador", para Carrancio.

"Cuando Ciudadanos hizo hincapié en estas peticiones, el PP nos acusó de alarmistas y ahora vemos que se han desvalijado 1.000 casas en un año, aunque desconocemos el número real de robos ante la falta de fiabilidad de los datos que proporciona la Delegación de gobierno", ha alertado Carrancio.

Otros delitos

También subieron en Cantabria, aunque en menor medida, los daños, un 12,8%, llegando a los 1.957, y los hurtos, cuatro décimas, hasta los 5.111.

Además de los robos con violencia en viviendas, a lo largo de 2016 no se registraron asesinatos ni homicidios dolosos en Cantabria, donde un año antes se contabilizaron tres, por lo que el descenso experimentado es del 100%.

Por contra, y al margen de estos, descendieron las infracciones relacionadas con el tráfico de drogas, un 20%, situándose por debajo del centenar (92), y los robos con violencia e intimidación, de los que se registraron 215, un 17,6% menos. También hubo en 2016 menos sustracciones de vehículos a motor que en 2015, concretamente 247, que representan una caída porcentual del 1,2.

Santander y Torrelavega

Si se atiende a la tendencia y evolución de las infracciones en los municipios cántabros de más de 50.000 habitantes -Santander y Torrelavega-, el descenso de delitos y faltas fue mayor en la comarca del Besaya, con una bajada del 2,5% (hasta los 1.562), frente al retroceso del 1,5% que anotó la capital (6.073), y a pesar del repunte del 1,7% experimentado en toda la región.

No obstante, los robos con fuerza en domicilios aumentaron más en Santander (un 25,1%, llegando a los 219) que en Torrelavega (un 9,8%, hasta los 67).

Y llama la atención que mientras los robos con violencia e intimidación bajaron un 24,2% en Santander, subieron un 8,3% en Torrelavega, situándose en 116 y 26, respectivamente.

También hay diferencia en el tráfico de drogas, pues en la capital cántabra este tipo de infracciones descendió el año pasado un 3,1%, mientras que lo hicieron de forma más notable en la ciudad del Besaya, con una caída del 40%, hasta contabilizarse tres casos.

Ciudadanos acusa a Ruiz de “falsear las estadísticas en robos” al no contabilizar...