La Audiencia Provincial juzga esta semana por estafa a 14 acusados de formar una red dedicada a falsificar nóminas y contratos de trabajo, así como a abrir cuentas bancarias con el fin de formalizar compras de bienes que luego no eran satisfechas.
El ministerio fiscal califica los hechos como delitos de estafa y falsedad en documento mercantil, y solicita penas de hasta dos años de prisión. El juicio comienza este lunes, 15 de mayo, en la Sección Primera de la Audiencia, y está previsto que continúe toda la semana hasta el jueves.
Según el relato del fiscal, los cabecillas de la red se dedicaban a captar a personas dispuestas a prestar su identidad para realizar compras a su nombre, a cambio de una promesa de dinero o parte de los bienes que "rara vez se cumplía, ni siquiera en parte".
Las compras se financiaban en gran medida presentando nóminas que falsificaban los principales implicados, así como contratos de trabajo o cartillas bancarias abiertas para la ocasión o falsas.
Con este modus operandi, entre mediados de 2006 y mediados de 2007 realizaron al menos 26 operaciones de compra de coches, motos, muebles, ordenadores, etc., que no se pagaron ni devolvieron, sino que los revendían o se quedaban con ello.
Estafa inmobiliaria
También comienza este lunes en la Sección Tercera otro juicio por estafa, esta vez contra un acusado de comprometerse a llevar a cabo una promoción inmobiliaria en Alicante, recibir un sueldo mensual de 1.000 euros para ello, así como una inversión de 300.000 euros, sin que finalmente comprara solar alguno ni iniciara la construcción de las viviendas.
El ministerio público pide una condena de tres años de prisión, multa de 3.600 euros e indemnización de 300.000 euros para las personas que le confiaron el proyecto y aportaron la inversión.
