El presidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla, y los representantes de la Asociación de Maltratados por la Administración (AMA), que agrupa a los afectados por las sentencias de derribo de viviendas, han acordado la celebración de una reunión anual para hacer un seguimiento de las medidas e iniciativas que buscan solucionar este problema y asegurar su patrimonio.
Ambas partes han acordado también otros encuentros cuando surjan asuntos y temas de interés relacionados con esta problemática, en el marco de una reunión en la que ha además AMA ha instado al Gobierno de Cantabria a que, entre otras cosas, proceda al pago de los daños morales a los afectados, y se impulsen y apoyen los planes generales de ordenación urbana (PGOU), con un plan de actuación y calendario concreto de actuaciones.
También han solicitado al presidente su apoyo para instar al Ejecutivo central a que inicie las modificaciones normativas necesarias con el fin de proteger el patrimonio de los afectados y que nadie más pase por la misma situación.
Antonio Vilela, presidente de AMA, ha explicado que la reunión anual con el presidente se unirá a los encuentros que ya mantienen periódicamente con la vicepresidenta y consejera de Universidades e Investigación, Medio Ambiente y Política Social, Eva Díaz Tezanos, junto a los directores de su departamento.
El presidente regional ha mostrado su voluntad para poner en marcha las soluciones necesarias para acabar con este problema y reparar el daño causado "cuanto antes". Ya han pasado 10 años desde que el Presidente manifestara públicamente que "estos señores no tienen culpa de nada, esto nos hubiera podido pasar a cualquier de nosotros, y pongo mi Gobierno a trabajar para buscar una solución lo antes posible".
Antonio Vilela, presidente de AMA, ha manifestado la buena predisposición del Ejecutivo, pero también ha resaltado que ésta siempre ha sido así desde hace mucho tiempo, y que los problemas vienen realmente a la hora del cumplimiento de los acuerdos.
El presidente de la asociación ha asegurado que una de las cuestiones que más les preocupan es la aprobación de los PGOU, ya que ha afirmado que “hay ayuntamientos, como Piélagos y Argoños, que son una auténtica vergüenza. Tienen un gran volumen de sentencias de derribo para el reducido tamaño de los municipios, y necesitan del apoyo y seguimiento continuo del Gobierno de Cantabria para cumplir objetivos concretos y que no vuelva a quedar todo en buenas palabras”. A su juicio, sin estos instrumentos no hay solución posible.
“Hace una década oímos las mismas palabras, así que es necesario empezar a llevar a cabo las cosas concretas. Acabemos en esta legislatura con esta cuestión”, ha concluido Vilela.
