El presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, recibe mañana martes, 31 de julio, en el madrileño Palacio de la Moncloa al presidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla, que ha confesado recientemente que acude a la reunión "un poco desanimado" tras la "mala noticia" de que el no saldrán adelante ni el déficit ni el techo de gasto de los Presupuestos Generales del Estado (PGE) de 2019. Revilla acude a la reunión consciente la política española "está muy mal" y hay "unos enfrentamientos terribles". "El interés general no prima sobre el partidista; estamos en una convulsión", ha manifestado. Revilla también ha asegurado que preguntará a Sánchez si la debilidad del Gobierno del PSOE puede conducir a elecciones generales anticipadas. Al respecto, ha valorado que es "difícil que haya unanimidad para quitar al que ahora está de presidente", pero ha cuestionado hasta qué punto merece la pena gobernar sin poder sacar adelante "cosas importantes". "Es una consideración que tendrá que hacer el presidente", ha opinado Revilla, que cree que la intención de Sánchez es "estar dos años" para intentar con su gestión "reforzar el crédito del PSOE, que estaba bastante mal".
Por su parte, el delegado del Gobierno español en Cantabria, Pablo Zuloaga, ha confiado recientemente en que Sánchez traslade a Revilla "acciones ciertas" para que los cántabros sepan "cuándo llegará la alta velocidad" a la comunidad. El también secretario general del PSOE de Cantabria ha expresado su confianza en que "el Gobierno de Sánchez traerá grandes noticias a Cantabria" pero, preguntado por los compromisos que el jefe del Ejecutivo podría asumir con Revilla, ha dicho que habrá que esperar a mañana martes para saberlo. "Por lealtad institucional, hay que esperar al martes y que sea Pedro Sánchez quien confirme al presidente de Cantabria las aspiraciones y la agenda que marca el Gobierno de España para con nosotros", ha añadido. Entre las reivindicaciones que Revilla lleva a esa reunión estará el AVE, una infraestructura sobre la que el delegado del Gobierno cree que hay que mantener un "debate sensato y sereno" pero que permita marcar "plazas" para su llegada a la comunidad porque "lamentablemente llevamos mucho tiempo hablando de cuándo va a llegar el AVE a Cantabria y los hechos han sido pocos". "Creo que el presidente Sánchez tiene la oportunidad de poner encima de la mesa acciones ciertas que nos digan a los cántabros cuándo llegará la alta velocidad a Cantabria, al igual que cuándo llegará la financiación del Hospital Valdecilla castigado durante dos años por el gobierno del PP, y tantas y tantas demandas sociales como la financiación de la ley de dependencia y la implantación de la LOMCE", ha concluido.
