A finales del pasado mes de septiembre se hacía pública la noticia de que aseguraba que el gigante alemán Volkswagen, una de las grandes multinacionales de la automoción, había estado estafando a instituciones y consumidores a través de un software trucado.
Se trataba de una modificación en el software de algunos modelos de la compañía -que también está detrás de marcas como Seat o Audi- que hacía que en las revisiones fuera indetectable que las emisiones contaminantes superaban los límites establecidos. Se calcula que el engaño afectó a más de once millones de vehículos en todo el mundo. En España, a 683.626 en total.
Sin embargo, lo últimos datos obtenidos de la Dirección General de Tráfico demuestran que la crisis interna y de imagen de Volkswagen no han hecho mella en sus ventas. De hecho, más cántabros han comprado coches de la marca en lo que va de año en comparación con el mismo periodo de 2014.
Las cifras de matriculaciones son claras. Hasta septiembre de 2014, se vendieron 60 vehículos de la marca en Cantabria: tres de ellos fueron camiones de hasta 3,5 toneladas, dos furgonetas, 54 turismos y uno otro tipo de vehículo no especificado. En el mismo periodo de 2015, un total de 83 vehículos de Volkswagen fueron matriculados en la región. De ellos, dos fueron furgonetas, uno otro tipo de vehículo, y 80 turismos.
Los afectados
Además del daño medioambiental innegable, y las consecuencias del engaño sobre diferentes administraciones, los principales afectados han sido los propios consumidores. Aquellos que eligieron un determinado modelo y una determinada marca por características y cualidades entre las que se encontraban el reducido nivel de emisiones contaminantes, ¿qué hacen ahora con su coche?
Facua puso en marcha un espacio en el que los afectados por el fraude de Volkswagen en España puedan reclamar sus derechos ante la compañía alemana. Se trata de la plataforma '#afectadosVolkswagen'. Así, los usuarios podían sumarse a las reclamaciones a través de esta etiqueta en las redes sociales o en la página web de la organización: facua.org/volkswagen.
La Unión de Consumidores de Cantabria, por su parte, reaccionó desde el primer momento exigiendo a Volkswagen indemnizaciones para los clientes afectados en la región. Más tarde puso a su disposición herramientas jurídicas y solicitó indemnizaciones de hasta 9.000 euros a los afectados por las posibles reparaciones, averías, desinstalaciones y daños morales.
También la propia empresa alemana facilitó en su página web una herramienta para identificar los automóviles afectados. Se trata de un buscador en el que, introduciendo el número de identificación del vehículo, se indica si el coche se ha visto involucrado en el fraude o no.
