Este próximo miércoles 20 se celebrará una nueva reunión de las partes en el Organismo de Resolución Extrajudicial de Conflictos (ORECLA), en la que los sindicatos pretenden que la negociación se "intensifique", y en este sentido han anunciado su disposición incluso de acudir a Madrid.
Pero en caso contrario, si les "siguen ninguneando", se llevarán a cabo siete jornadas de paros los días 22, 24 y 27 de julio y 3, 4, 6 y 7 de agosto, según se acordó el pasado jueves en un Pleno extraordinario del comité de empresa y este pasado lunes se trasladó a la asamblea de trabajadores.
El objetivo, ante la posible venta de la compañía, es "conservar" los puestos de trabajo de la factoría de Treto y "asegurar y mantener" las inversiones necesarias para ello. "Nos quedan bastantes años de trabajo y además queremos dejar una fábrica que tenga futuro para las próximas generaciones", ha indicado a Europa Press el presidente del comité de empresa, Moisés Huerta.
Según ha explicado, las negociaciones entre el comité y la dirección se han estado desarrollando los miércoles y jueves durante los meses de junio y julio, incluida la negociación con Robert Bosch Iberia. Sin embargo, "unilateralmente" la empresa suspendió la última reunión de junio y en julio las ha reducido solo a los miércoles, también "unilateralmente".
El pasado miércoles 13, en la reunión del ORECLA, los sindicatos notaron "que la negociación no avanza, que nos dan largas", y dado que la "fecha tope" para la negociación es el 31 de julio, el comité acordó que "o se intensifican las reuniones, o se llega a acuerdos ya" o se realizarán los paros citados.
