viernes. 19.04.2024

Aunque se trate de una herramienta muy útil para llevar a cabo grandes proyectos, los años de crisis dejaron claro que con la financiación debemos andar con cuidado. Ahora que España es el país europeo donde más ha crecido la concesión de préstamos personales, con un 10,36 % más interanual de acuerdo con el BCE, debemos conocer cómo conseguir financiación de manera responsable para evitar los errores del pasado. Uno de los peligros más comunes es no saber qué tipo de financiación es la que más nos conviene según distintos parámetros. Un error que podría costarnos más de 4.000 euros en intereses, según nos explica el comparador financiero HelpMyCash.com de acuerdo con las simulaciones que ha realizado.

¿CÓMO CAEMOS EN ESTE ERROR FATAL?

Parece que gastar 4.000 euros de más según la financiación que escojamos sea imposible, pero la respuesta a este gasto de más es fácil: la facilidad que ofrecen las tarjetas de crédito. En el tercer trimestre de 2017 había 51,77 millones de tarjetas de crédito en circulación en nuestro país, de acuerdo con el último informe del Banco de España. La posibilidad de obtener dinero a crédito de manera instantánea hace que optemos por este método de financiación en vez de por los préstamos personales, un producto más adaptado a las grandes necesidades de liquidez.

En el tercer trimestre de 2017 había 51,77 millones de tarjetas de crédito en circulación en nuestro país

Si bien las tarjetas de crédito pueden ser la alternativa más cómoda para gastos no tan grandes, cuando queremos financiar cantidades que podemos obtener con los préstamos es siempre preferible elegir los segundos. La razón es simple, explica HelpMyCash.com: mientras que la TAE media de las tarjetas de crédito ronda el 24 %, en los préstamos personales este porcentaje actualmente se sitúa en el 8 %. Así, por financiar la misma cantidad durante el mismo plazo acabaríamos pagando el triple con las tarjetas de crédito.

Aunque el límite de nuestra tarjeta de crédito nos permita obtener cantidades de hasta 10.000 euros simplemente pasando el plástico por el datáfono, no es conveniente utilizarlas a partir de cantidades de 2.000 euros, que ya podemos obtener con los créditos al consumo. Así, de acuerdo con las simulaciones de HelpMyCash.com, en un préstamo de 8.000 euros a devolver en cinco años (con un interés del 24 %) con una tarjeta de crédito pagaríamos 230 euros al mes y un total de 13.808 euros. En cambio, con un préstamo personal de las mismas características al 8 %, la mensualidad sería de 162 euros y el total a pagar ascendería a 9.732 euros, una diferencia exacta de 4.076 euros en intereses generados.

En la mayoría de los casos justificamos el uso de una tarjeta de crédito por la rapidez con la que queremos conseguir el dinero, pero actualmente gracias a la aplicación del fintech es posible obtener préstamos en dos días. Cofidis, por ejemplo, nos da una preaprobación inmediata al solicitar su Créditos Proyecto y el préstamo P2P Younited Credit aprobará definitivamente nuestra solicitud en solamente 48 horas.

Elegir mal tu financiación puede hacerte gastar hasta 4.000 euros de más