El Ministerio de Educación y Formación Profesional estudia introducir un método de evaluación voluntaria para docentes con el propósito de "mejorar la calidad del profesorado de las enseñanzas no universitarias".
La ministra Isabel Celaá ha sugerido esta idea como punto de partida para alcanzar un futuro acuerdo sobre la profesión docente ,en un encuentro con los medios celebrado este lunes.
Este martes, el Ministerio celebra un foro de expertos con el título de 'Educar para el siglo XXI. Desafíos y propuestas sobre la profesión docente' que se dividirá en tres paneles. Uno estará dedicado a la formación inicial del docente, otro a la inducción a la profesión docente y el tercero a la formación permanente y la evaluación al profesorado.
"Cambiar la carrera profesional de los docentes es un cambio difícil, pero que se ha hecho en otros países", ha apuntado Celaá durante el encuentro con los medios, donde se ha mostrado convencida de que no existirán "demasiados obstáculos" para alcanzar un acuerdo con el resto de formaciones políticas.
"El Ministerio tiene un compromiso inequívoco con el profesorado", ha añadido la ministra, que asume como un compromiso personal la reforma de la profesión docente. Un asunto que, en sus propias palabras, había quedado "parado" en los últimos años relegado por otros debates educativos.
"La cuestión es cómo convertimos a un docente en un buen maestro", ha dicho la ministra, que ha señalado a los periodistas a Finlandia o Canadá como dos países en los que le gustaría que se inspirara el sistema educativo español.
"Quiero que España sea un país de conocimiento", ha agregado, señalando también la necesidad de transformar los currículos escolares para que exista "más profundización y menos extensión" en lo que aprende el alumnado en las aulas españolas.
