Los trabajadores de Sidenor en Reinosa han iniciado hoy lunes con un seguimiento "unánime" los paros convocados por el comité de empresa para exigir que en la operación de compraventa de la planta que se está negociando con dos grupos empresariales incluya cláusulas de garantía de sus puestos de trabajo más allá de junio de 2019. Según ha informado a Europa Press el presidente del comité de empresa, César Fernández (CCOO), en el primer paro de hoy –de una hora por turno– ha habido un seguimiento total por parte de la plantilla, excepto los tres trabajadores incluidos en los servicios mínimos. El comité de empresa confía en que este seguimiento se mantendrá en los paros de los siguientes turnos y ha señalado que si se mantienen "con el mismo éxito" los paros convocados para los próximos días –desde hoy hasta este sábado, 18 de mayo, y desde el lunes 20 hasta el sábado 25– se realizará la manifestación prevista para este viernes, 17 de mayo, en Santander, que se espera sea "multitudinaria". Cuando anunció los paros, el comité de empresa ya avisó de que si la Dirección de Sidenor no mostraba "un interés negociador", en las semanas posteriores a las movilizaciones ya acordadas se ampliará el nivel de los paros.
Los paros se han iniciado sin que, por el momento, haya habido ningún contacto de la Dirección de la empresa con el comité de empresa. Los representantes de los trabajadores reclaman a la Dirección que abra un "proceso negociador" con el comité para fijar las "condiciones mínimas" para la plantilla que debe incluir, a su juicio, el contrato de compraventa de la fábrica. Cuando se aprobaron los paros, el comité de empresa explicó que en las negociaciones que está manteniendo la Dirección para vender la planta, los dos ofertantes –la sociedad NFL y la que lidera el empresario Javier Cavada– se han comprometido únicamente a respetar los compromisos sobre la plantilla contemplados en su día en el acuerdo suscrito en 2017 entre Sodercan –sociedad pública del Gobierno de Cantabria– y la Dirección de la empresa hasta su fecha de expiración, en junio de 2020. Sin embargo, el comité quiere que "sea quien sea" el que adquiera la planta, amplíe estos compromisos a "un plazo más largo", para lo que reclama que se incluyan en el contrato de compraventa cláusulas que lo garanticen.
