La comisión de seguimiento del pacto de Gobierno entre el PRC y el PSOE se reunirá el próximo lunes, 13 de enero, a partir de las 16:30 horas, en el Parlamento de Cantabria, según han acordado las dos formaciones.
Así lo han hecho después de que ayer la Ejecutiva de los regionalistas aprobase proponer a los socialistas esa jornada para celebrar el encuentro, con el que se espera poner fin a la crisis de la última semana en el bipartito a través de un replanteamiento del pacto.
Por parte del PRC, están en esa comisión de seguimiento la secretaria de Organización del partido y consejera de Presidencia, Paula Fernández; el portavoz parlamentario, Pedro Hernando; el secretario de Administración Local y consejero de Desarrollo Rural, Guillermo Blanco; y la alcaldesa de Polanco y diputada regional, Rosa Díaz. Mientras que del PSOE se sentarán la secretaria de Organización y portavoz parlamentaria, Noelia Cobo; el secretario de Política Municipal y alcalde de Cartes, Agustín Molleda; la secretaria Ejecutiva de Turismo y Comercio y consejera de Economía y Hacienda, María Sánchez; y el presidente del Parlamento, Joaquín Gómez.
La reunión tendrá lugar en el despacho del presidente de Cantabria en la Cámara regional y está previsto que, tras dos horas, representantes de ambas comisiones negociadoras hagan declaraciones a los medios de comunicación sobre ese replanteamiento del pacto de Gobierno.
Un replanteamiento que buscará cerrar la crisis en el bipartito, que se inició al decidir el PRC que votaría 'no' a la investidura de Pedro Sánchez y los socialistas comunicasen que, si votaban en contra, daban por roto el pacto de Gobierno en Cantabria.
Pero, tras materializarse el 'no' del PRC con el voto del diputado nacional José María Mazón, la Comisión Ejecutiva del PSOE cántabro se reunió para analizar las consecuencias pero finalmente no consumó su órdago y decidió continuar en el Ejecutivo.
Tras ello, el presidente cántabro y secretario general del PRC, Miguel Ángel Revilla, dijo este jueves que su partido estaba dispuesto a seguir gobernando con los socialistas siempre que éstos se comprometan a respetar la figura del presidente de Cantabria, es decir a él, y a reivindicar ante el Gobierno del Estado el cumplimiento de los compromisos con la comunidad autónoma.
