El pasado 28 de septiembre la líder de Cs, Inés Arrimadas, rechazaba la idea de una renovación de la formación naranja en Cantabria y nombraba coordinador del partido en la región a Félix Álvarez, que dimitió por mentir ante el Comité Autonómico y ocultar a sus miembros la contratación del que fuera diputado en el Congreso, Rubén Gómez, como asesor del Grupo Parlamentario Ciudadanos en la Cámara regional. Los valores éticos de Cs, que siempre ha sido adalid de la transparencia y la sinceridad, quedaban de esta forma en entredicho. Pero a esa decisión se ha sumado una ‘purga’ en el Comité Autonómico en la que se ha eliminado todo rastro de voz crítica y se ha conformado un nuevo grupo a la medida de Álvarez.
En esa ‘renovación’ llama la atención la ausencia de la que es su número dos en el Parlamento de Cantabria, donde Álvarez sigue siendo portavoz. La ganadera Marta García no solo no tiene ningún cargo en el nuevo Comité, sino que ni siquiera ocupa un sillón en el grupo que decide los pasos políticos que da la formación en nuestra Comunidad Autónoma.
Su ausencia no es la única, pero sí puede que sea una de las más llamativas, sobre todo porque el tercer diputado con el que cuenta Cs en Cantabria, Diego Marañón, sí aparece en el nuevo Comité –y es uno de los pocos que se mantiene respecto a la antigua agrupación-. Hay que recordar que Álvarez “mintió” a García y Marañón al ocultarles la contratación de Rubén Gómez como asesor del Grupo al que los tres pertenecen. Eso es lo que se desprende de las palabras de Álvarez ante el Comité, al aseverar que la contratación era absolutamente falsa porque antes habría consultado al resto de diputados, algo que negó Marañón a este medio, diciendo que no conocía “la existencia del contrato” con el que fuera diputado autonómico.
PURGA DE CRÍTICOS
La ‘renovación’ en Cs Cantabria ha quitado de la actualidad política a las principales voces críticas con Álvarez dentro del Comité Autonómico. De hecho, de los nombres que ostentaban responsabilidad antes de que Arrimadas volviera a colocar a Álvarez como coordinador, tan solo Diego Marañón se mantiene al frente de Acción Institucional.
El cambio más llamativo, y que es una buena muestra de la ‘criba’ política realizada por el antiguo nuevo coordinador, es la salida de Esteban Martínez Poo, que ostentaba el sillón de Secretario de Organización –el ‘número dos’ en la estructura interna de cualquier partido-, siendo sustituido por Rubén Gómez, que vuelve a tener responsabilidades en la formación naranja después de no ser elegido en las últimas elecciones generales y firmar el contrato que Félix Álvarez ocultó a todo el partido.
Tras las mentiras ante el Comité, el propio Álvarez reconoció en una carta a los afiliados que había ocultado la contratación de un compañero, algo que calificó de “asunto menor”. Ante esto, Poo consideró que sus palabras eran la prueba de que “asume personalmente la contratación de Rubén Gómez”, de la que en ningún momento tuvo conocimiento hasta que fue desvelado por este medio.
También sale de la estructura directiva María Luisa Sanjuán, responsable de Programas y Áreas Sociales, quien dimitió el pasado 2 de septiembre como concejala de Cultura, Deporte y Transparencia tras verse afectada por un caso cuanto menos turbio relacionado con el director del IMD de Santander, Fortunato Porras, que a su vez dimitió al conocerse que un familiar suyo había sido contratado por uno de los clubes que reciben subvenciones municipales. El mayor mérito de Porras para ponerse al frente de la gestión del Instituto Municipal de Deportes fue ser designado para el cargo ha sido ir en la lista de Ciudadanos al Ayuntamiento de Camargo como número seis, y ser el número ocho en la lista que el partido naranja presentó al Parlamento de Cantabria en los comicios autonómicos de 2019.
Finalmente, Nacho Hernando deja de ser responsable de Comunicación, siendo sustituido por la ex ‘popular’ Esther Merino. En este caso, sin embargo, Hernando se mantiene en un Comité Autonómico a la medida del coordinador, que se completa con Javier Fernández Soberón (alcalde de Astillero, procedente del PP y que sustituyó a Álvarez cuando dimitió), Javier Ceruti (portavoz del equipo de gobierno PP-Cs en el Ayuntamiento de Santander), Miguel Ángel Laso (Camargo), Rosa Palacio (Castro Urdiales), África Álvarez (San Vicente de la Barquera) y Julio Ricciardello, concejal en Torrelavega.
De esta ‘limpia’ se desprende también que en la lista cremallera que deberá presentar el partido en las elecciones autonómicas de 2023 la número dos de Álvarez será, presumiblemente, Esther Merino.
