El Presupuesto de Cantabria para 2018 presentado por el Gobierno PRC-PSOE, que asciende a 2.729 millones, un 4,9% más que el de 2017, continuará su tramitación al superar este martes el debate de las enmiendas a la totalidad de PP, Podemos y Ciudadanos, rechazadas con el 'no' del diputado del grupo mixto Juan Ramón Carrancio, ex de Ciudadanos y al que el resto de la oposición tacha de "tránsfuga" y que hoy ha vuelto a votar los mismo que regionalistas y socialistas.
Aunque todas las enmiendas a la totalidad a los PGC han sido rechazadas por el voto de PRC, PSOE y Carrancio no todas han decaído con igual resultado. Así, mientras PP y Ciudadanos han apoyado las tres enmiendas, Podemos solo ha votado 'sí' a la suya y se ha abstenido en la votación de las iniciativas planteadas por 'populares' y por el partido naranja.
ALUSIONES AL TRANSFUGUISMO
El debate de enmiendas se ha visto plagado de continuas referencias al "transfuguismo", sobre todo por parte de PP, Podemos y Ciudadanos, que han acusado al Gobierno de servirse ahora del "tránsfuga" Carrancio para lograr que sus cuentas para 2018 sigan su tramitación parlamentaria y -temen- vayan a salir aprobadas en el debate final del 22 de diciembre.
PP, Podemos y Ciudadanos han insistido en solicitar su devolución al Gobierno para que lo haga de nuevo, algo que no ocurrirá al superar el Presupuesto el debate de totalidad
La alusión más llamativa ha sido la de Podemos, cuyos tres diputados han lucido camisetas con frases del presidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla (PRC), en contra del transfuguismo, al que han pedido que "actúe en consecuencia".
Los 'populares', por su parte, también han criticado que el Gobierno vaya a usar como "atajo" al "diputado 18" (Carrancio) para intentar que el Presupuesto salga adelante, algo de lo que -han advertido- los ciudadanos "tomarán buena nota".
Cs, partido con el que Carrancio se presentó a las elecciones autonómicas de 2015 y obtuvo su acta de diputado, ha considerado "una inmoralidad" que el Gobierno se ampare en un "tránsfuga" que, a su juicio, le va a permitir aprobar "gratis" sus cuentas.
Por su parte, los partidos que sustentan al Ejecutivo, PRC y PSOE, no han dedicado demasiado tiempo a contestar a las acusaciones de la oposición sobre este tema del "transfuguismo", aunque sí, el portavoz regionalista, Pedro Hernando, ha reprochado que el "disputado voto del señor Carrancio", solo "vale para la oposición pero no para el Gobierno".
También Carrancio ha respondido a algunas de las acusaciones que le han dirigido el resto de la oposición, sobre todo a las de su expartido, Ciudadanos, al que ha reprochado que le llame tránsfuga cuando es una formación que, según ha dicho, se ha construido a "base de robar cargos a otros partidos".
CONTENIDO
Y ya sobre el contenido del Presupuesto, PP, Podemos y Ciudadanos no se han mostrado de acuerdo con las bondades de las cuentas presentadas por el Gobierno expuestas al inicio de la sesión plenaria por el consejero de Economía, Hacienda y Empleo, Juan José Sota (PSOE), que las ha calificado de "austeras" e "inversoras" y ha negado, como sostienen partes de la oposición, que los ingresos estén inflados. Sí ha reconocido que están "muy condicionadas" por la deuda contraída durante la anterior legislatura del PP, que, según ha dicho, toca ahora amortizar.
PP, Podemos y Ciudadanos han insistido en solicitar su devolución al Gobierno para que lo haga de nuevo, algo que no ocurrirá al superar el Presupuesto el debate de totalidad, algo que supone que las grandes cifras del mismo de ingresos y gastos pasan a ser inamovibles, y que sólo se podrá trasvasar dinero dentro de una misma sección o consejería a través de enmiendas parciales.
PSOE y PRC han criticado la ausencia de "alternativa real" en unas enmiendas que han tachado de "indefendibles, puro envoltorio, el no por el no"
El PP pedía la devolución del Presupuesto de 2018 al considerar que es "de imposible cumplimiento" por "irreal", salvo en la subida de impuestos; "no tiene nada de social" ni será un "revulsivo" para la región y sostiene que en lugar de ser un "instrumento de desarrollo regional" sino de "campaña electoral".
En una línea similar, Podemos ha opinado que las cuentas de 2018 presentadas por el Gobierno PRC-PSOE "siguen perjudicando" los intereses de Cantabria y de la ciudadanía, insisten en un "modelo que hasta ahora no ha dado resultado" y "no van a suponer un avance sustancial para alcanzar progreso social y económico en Cantabria".
También ha denunciado que se "recortan" las partidas para el Plan de Recuperación Industrial del Besaya y ha considerado que no es suficiente el incremento de otras, como la destinada a Renta Social Básica.
Por su parte, Cs, partido que favoreció con su abstención la aprobación del presupuesto de 2017 en virtud de un acuerdo que forzó al Gobierno a retirar su reforma fiscal, ha justificado sobre todo su enmienda a la totalidad en "la subida de impuestos" que el Gobierno prevé con un objetivo "meramente recaudatorio" y para "tapar su mala gestión castigando a la clase media trabajadora de Cantabria".
Tras escuchar los argumentos de PP, Podemos y Cs, PSOE y PRC han criticado la ausencia de "alternativa real" en unas enmiendas que han tachado de "indefendibles, puro envoltorio, el no por el no". A la vez, han defendido que el Presupuesto del Gobierno es "muy social, volcado en el Estado de Bienestar, que fortalece el crecimiento y la inversión, y apuesta por la innovación, la industria y el cambio de patrón de crecimiento".
También como respuesta a las críticas de la oposición sobre la negociación presupuestaria llevada a cabo por el Gobierno y los partidos que lo soportan, el portavoz parlamentario del PSOE ha reprochado al PP y a Ciudadanos que están "más preocupados de con quién se sientan" a negociar que "para qué se sientan" y también ha censurado la "intransigencia" de Podemos, al que ha acusado de confundir negociación con "imposición".
INCUMPLIMIENTOS DEL ESTADO
En el debate de enmiendas a la totalidad también han reaparecido, los "incumplimientos" del Estado, entre ellos los relacionados con Valdecilla, que han vuelto a ser denunciados por Sota y los partidos que sustentan al Gobierno y a los que ha respondido el PP.
La líder 'popular', María José Sáenz de Buruaga, ha defendido que el Ejecutivo de Mariano Rajoy "está atendiendo como nunca antes las reivindicaciones" de Cantabria y han acusado al Ejecutivo PRC-PSOE de "tratar de sembrar odio" contra el Gobierno de Mariano Rajoy "con su falso discurso del 'España nos roba'". "Empiezan ustendes a transitar por una senda muy peligrosa", ha advertido a regionalistas y socialistas.
Ésta ha achacado la "escalada" del bipartito regional contra el Gobierno de España y del PP a una "estretagia de Revilla" que, según ha dicho, no tiene como objetivo "el bien de Cantabria sino la cabeza" del minitro de Fomento, el exalcalde de Santander Íñigo de la Serna, al que el presidente cántabro tiene "pánico".
Precisamente, en relación a Fomento, Sota ha criticado en su intervención la licitación pública de este ministerio, con 6,7 millones de euros de enero a septiembre, frente a 70 de la comunidad autónoma y los ayuntamientos, algo que en su opinión, "tiene mucho que ver con que el crecimiento de Cantabria no repunte todo lo deseado".
También por parte del Gobierno y de PRC y PSOE han vuelto a denunciar los "incumplimientos" del Estado sobre Valdecilla, acusaciones tras las que Sáenz de Buruaga ha subrayado que el Gobierno de la Nación "ya ha consignado" más de tres cuartas partes de los 100 millones comprometidos para Valdecilla. Además, ha asegurado que el PP "trabaja para que los Presupuestos vuelvan a dar una oportunidad a Valdecilla".
