La Policía Local de Santander ha denunciado al responsable de un establecimiento de hostelería de la calle Floranes por estar, a las 23:30 horas, abierto incumpliendo la orden de la Consejería de Sanidad que ordena el cierre de discotecas, salas de fiestas, pubs y whiskerías. Además, no presentó la licencia de apertura y no tenía visible el cartel anunciador de la misma.
También han denunciado a otro hostelero de la calle Castelar por rebasar el horario de cierre establecido, en la una de la madrugada, al tener abierto a la 1:30 horas. También tenía música en tono elevado, perturbando el descanso de la vecindad, no presentó la licencia de apertura ni tenía visible el cartel anunciador, pero sí las puertas abiertas.
Además, los agentes denunciaron en la tarde noche del miércoles a un total de doce personas por beber alcohol en la vía pública en diferentes puntos de la ciudad.
De madrugada, a las 3:00 horas, en la calle Nicolás Salmerón, los efectivos denunciaron al responsable de otro establecimiento público, un hostal en este caso, por no presentar la licencia de apertura y por no tener visible el cartel anunciador de la misma. Y a las 2:45 horas en la calle Teniente Fuentes Pila, a requerimiento de vecinos, los policías denunciaron al responsable de una vivienda por causar molestias por música y voces en tono elevado originadas por la celebración de una fiesta.
