El hombre acusado de abusos sexuales a una menor ha aceptado una condena de dos años y un día de prisión, tras llegar su defensa a un acuerdo con la Fiscalía, que pedía para él cuatro años de cárcel, lo que ha evitado la celebración del juicio previsto para este martes en la Sección Primera de la Audiencia Provincial de Cantabria.
Así, el acusado será condenado por un delito de abusos sexuales a menor de trece años, y la pena, además de prisión, incluirá también dos años de libertad vigilada (tres menos de los que reclamaba el fiscal) y cinco de prohibición de acercamiento a menos de 500 metros y comunicación con la víctima, lo mismo que pedía Fiscalía.
Además, se le impondrá la inhabilitación especial para el derecho al sufragio pasivo durante dos años y un día.
Ambas partes han mostrado su conformidad con el acuerdo, mediante el cual el Ministerio Fiscal ha renunciado a los dos años más de cárcel solicitados inicialmente.
Los hechos que se le imputan corresponden a un episodio ocurrido en diciembre de 2016, cuando el hombre se tumbó contra la espalda de la menor en un sofá con "distintos pretextos" y para "satisfacer sus deseos libidinosos".
Sin embargo, la Fiscalía señaló en su escrito de acusación que el hombre había realizado tocamientos a la menor, que tenía siete años la primera vez que ocurrió, en tres episodios -en septiembre de 2014, en abril de 2015 y en diciembre de 2016-, por lo que le consideraba autor de un delito de abusos sexuales a menor de trece años continuado.
Los hechos fueron denunciados en enero de 2017 por la madre de la menor, con la que el acusado tenía parientes en común, por lo que coincidían en diferentes sitios.
