La 'Encuesta de Condiciones de Vida 2014' que elabora el Instituto Cántabro de Estadística revela que 177.735 hogares de un total de 239.259, es decir un 74%, recibe alguna prestación social.
El porcentaje de hogares que recibe prestaciones sociales en Cantabria, incluidas prestaciones por enfermedad, es superior al de la media nacional, que está en el 67%.
En concreto, el 36,3% de los hogares de Cantabria (86.882) recibe prestaciones por desempleo, cinco puntos por encima del conjunto del país, donde reciben estas ayudas el 31,4% de los hogares.
Además, el 31,3% de los hogares en la región (74.980) perciben prestaciones por jubilación, también por encima de la media nacional del 27,7%.
Un total de 41.936 hogares en Cantabria, el 17,5%, perciben prestaciones por supervivencia, casi cuatro puntos por encima de la media (13,7%), mientras que 26.860 hogares en la comunidad, el 11,2%, reciben prestaciones por invalidez cuando la media de las comunidades es del 8,8%.
En este sentido, Cantabria tiene menores porcentajes que la media en cuanto a las rentas más bajas pero también inferiores en las rentas más altas.
Así, el 7,8% de los hogares de Cantabria (18.652) tiene una renta disponible de hasta 9.000 euros frente al 13,6% de media en España y un 17,7% de hogares (42.315) con renta superior a los 35.000 euros frente al 23,8% en el conjunto de las comunidades.
El mayor porcentaje de hogares de Cantabria, un 21,1% (50.377) tiene una renta de entre 14.000 y 19.000 euros de renta disponible.
De este modo, la renta media por hogar en Cantabria en 2014 es de 23.905 euros, un -1,2% menos que el año anterior. En España la renta es superior (26.154) pero también la caída respecto a 2013, del -2,3%.
La diferencia de renta entre la comunidad y el país se atenúa si se mide por persona, puesto que la media en Cantabria es de 9.824 euros, con un descenso del -0,2% respecto al año anterior, y en España es de 10.391 euros, un -1,3% menos.
Por otra parte, 32.927 hogares de Cantabria, el 13,7%, tiene algún préstamo no relacionado con la vivienda, que supone una "carga pesada" para más de la mitad (54,5%) de los hogares suscriptores.
