El Ayuntamiento de Camargo ha aprobado nuevas medidas fiscales para facilitar que vecinos y empresas del municipio puedan disponer de mayor liquidez durante la emergencia sanitaria por el coronavirus, y que así "las obligaciones tributarias inmediatas afecten lo mínimo posible a los contribuyentes".
El Consistorio ha decidido aplazar a finales de año el cobro del impuesto de actividades económicas, que se suma al retraso del pago del de vehículos e inmuebles aplicados esta semana. Así, si en una primera fase se retrasó el periodo de cobro del Impuesto de Vehículos de Tracción Mecánica (IVTM) y el del Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI), en este segundo paquete de medidas la administración camarguesa ha actuado sobre el Impuesto de Actividades Económicas (IAE) y sobre el recibo de la tasa de Agua, Recogida de Basura y Alcantarillado.
El objetivo es "facilitar una vuelta ordenada a la actividad económica una vez que finalice el estado de alarma", según indica la alcaldesa, Esther Bolado, en un comunicado.
Por su parte, el primer teniente de alcalde y concejal de Hacienda, Héctor Lavín, ha subrayado que se trata de "medidas reales y concretas que ya entran en vigor". Según el edil, persiguen que vecinos y empresas tengan "más facilidades para afrontar ahora otros gastos más urgentes, en un momento en los que los ingresos también pueden ser menores como consecuencia de la pandemia mundial por el coronavirus".
SEGUNDO PAQUETE DE MEDIDAS
Así, en este segundo paquete de medidas se ha aprobado la modificación del periodo de cobro del IAE correspondiente al ejercicio de 2020, que queda retrasado en el plazo de dos meses y fijado para el 15 de octubre al 20 de diciembre, cuando su fecha inicial sería entre el 15 de agosto y el 20 de octubre. En el caso de los recibos domiciliados del IAE, la nueva fecha de cargo se ha fijado para el 20 de diciembre en vez de la inicialmente prevista del 20 de octubre.
En cuanto al recibo de Agua, Recogida de Basura y Alcantarillado, también se han modificado las fechas de cargo en cuenta de los recibos domiciliados pasando a ser el último día del periodo de cobro. Así, para los recibos correspondientes al primer trimestre de 2020 la fecha de cargo en cuenta de los recibos domiciliados se ha establecido el 31 de julio, para el segundo trimestre el cargo a cuenta de los recibos domiciliados el 30 de septiembre, y para el tercer trimestre será el 30 de diciembre.
