jueves. 28.03.2024

La Guardia Civil ha desmantelado un grupo organizado acusado de estafar unos 75.000 euros a cinco empresas de alimentación de ámbito estatal mediante el llamado timo del nazareno, consistente en adquirir mediante engaño productos que no pagaban y que vendían después a un precio muy inferior al del mercado, utilizando para ello la identidad de terceras personas. En el marco de esta operación se ha detenido a 12 personas entre enero y marzo de este año y se investiga a otra más (ocho hombres y cinco mujeres en total), vecinos de las localidades cántabras de Torrelavega, Guriezo, Santoña, Barreda (municipio de Torrelavega) y San Cibrián (municipio de Santa Cruz de Bezana), como presuntos autores de delitos de estafa a dos empresas aceiteras de las provincias de Granada y Jaén, una quesería de Zamora y otras dos empresas de Murcia, una dedicada a las golosinas y otra de cafés. Se calcula que la organización consiguió mediante engaño unos 60.000 euros en quesos y aceite, cerca de 9.000 euros en café y algo más de 6.000 euros en golosinas. Todos estos productos fueron vendidos posteriormente a un precio muy inferior, tanto en venta directa puerta a puerta como en mercadillos o mediante anuncios en internet y redes sociales, según ha informado hoy martes la Guardia Civil.

Para dar mayor credibilidad a los pedidos, utilizaban direcciones de correos electrónicos con palabras propias del sector como "ventas, almacén, comercio", etcétera

La investigación comenzó el pasado mes de enero después de que la Guardia Civil detectara en Cantabria una furgoneta que llevaba quesos de una marca originaria de la provincia de Zamora, cuyo conductor y único ocupante no pudo acreditar el origen de la mercancía. Ante la sospecha de que se intentara comercializar el producto –posiblemente adquirido de forma irregular– en Cantabria, se alertó a las diferentes unidades, lo que permitió detectar en el mercado semanal de Santoña a un hombre y una mujer que tenían a la venta 24 quesos enteros y 24 cuñas de la misma marca de Zamora y que tampoco pudieron acreditar su legítima procedencia. Agentes de la Guardia Civil de Torrelavega se pusieron entonces en contacto con la empresa de quesos zamorana, que confirmó tres envíos a Cantabria de importante cuantía que no habían cobrado. Igualmente, se comprobó que había otras empresas perjudicadas por pedidos realizados el año pasado con destino a Cantabria y no cobrados, por lo que se sospechó de la existencia de una organización asentada en esta comunidad autónoma que podía estar especializada en el timo del nazareno. Al mismo tiempo se averiguó que las personas que habían realizado los pedidos se habían hecho pasar por proveedores, empresarios o comerciantes del sector de distribución a la hostelería. Para dar mayor credibilidad a los pedidos, utilizaban direcciones de correos electrónicos con palabras propias del sector como "ventas, almacén, comercio", etcétera. También usaban como medio de contacto teléfonos a nombres de otras personas que nada tenían que ver con los receptores de las mercancías, comprobándose que la mayoría de las líneas fueron dadas de alta a nombre de un hombre que se encuentra en prisión desde finales de 2016. Una vez que se ponían en contacto con las empresas, facilitaban como compradores la identidad de terceras personas que no aparecían en listas de morosos y de esta forma poder recibir los pedidos. Los cabecillas de la organización conseguían los datos de estas terceras personas mediante previo pago, promesas e incluso en algunas ocasiones con amenazas, extorsión o usurpación de la identidad. Los pagos a las empresas se negociaban como mínimo a un mes vista desde la recepción de la mercancía, pero no se realizaban. Y como punto de entrega se fijaban lugares próximos a negocios para de esta forma dar mayor credibilidad. Una vez avisados del envío, los acusados solían ponerse en contacto con la empresa de logística para recoger la mercancía en sus propios almacenes en Cantabria o facilitando otras direcciones, en estos casos ya reales, donde el transportista entregara el pedido.

Una vez identificados de los cabecillas de la organización –un hombre y dos mujeres– y los encargados de aportar identidades, de la recogida de los envíos o de las ventas –en las que solían participar también los cabecillas–, se fueron realizando las detenciones. Durante la operación se recuperaron más de 70 quesos de diferentes pesos recogidos por la empresa propietaria y 50 litros de aceite que fueron donados al centro benéfico Hogar del Transeúnte de Torrelavega por indicación de la empresa de origen. La investigación ha sido realizada por el Equipo de Policía Judicial de la Guardia Civil de Torrelavega con apoyo de efectivos de la patrulla Fiscal y Fronteras de Polanco, del puesto de Santoña y del Seprona de Cabezón de la Sal. Las diligencias instruidas se han entregado en el Juzgado de Torrelavega.

Desmantelado en Cantabria un grupo organizado que estafó 75.000 euros con el ‘timo del...
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