jueves. 28.03.2024

Un estudio realizado a lo largo del año 2015 por BioVía Consultores Ambientales, promovido por Ecologistas en Acción Cantabria, ha determinado "claramente" que la factoría de Solvay ubicada en Barreda (Torrelavega) es un "foco emisor de mercurio". Se trata de una de las ocho plantas de cloro-álcali de España que utilizan la tecnología de celda mercurio, cuya caducidad se ha fijado en 2017 por la Unión Europea.

En concreto, el citado estudio, denominado 'Biomonitorización de la contaminación atmosférica por mercurio en Torrelavega', concluye que en el entorno más cercano a dicha industria existe una contaminación "entre moderada y alta" por mercurio, en "puntos calientes" cuya localización viene determinada por el régimen de vientos dominantes en cada momento. En el área de mayor impacto, el mercurio en el aire consiguió que la concentración inicial en los briocaptadores se multiplicara entre 6 y 19 veces.

En las conclusiones del informe, que ha facilitado este jueves Ecologistas en Acción Cantabria, se indica que el área de mayor impacto por mercurio durante las ocho semanas en que se desarrolló el estudio se extendió 500 metros al oeste y al sur del complejo industrial, afectando "moderadamente" a áreas residenciales de la localidad de Barreda. También ha constatado que a 500 metros de dicho perímetro la contaminación por mercurio es "nula".

Los ecologistas han sostenido que el "legado dejado por Solvay de contaminación por mercurio" supone "una deuda con los vecinos del entorno"

El estudio se enmarca dentro del I Concurso nacional 'Vigila tu aire' convocado por Biovía Consultor Ambiental en julio de 2014 y en el que Ecologistas en Acción de Cantabria obtuvo la tercera posición "por la trascendencia" del caso de estudio presentado y por sus antecedentes como agente participativo en estudios sobre el mercurio en el aire de Torrelavega.

Entre los objetivos del mismo ha estado determinar los niveles de contaminación por mercurio en el aire durante un período de ocho semanas mediante biocaptadores (musgos). Este es el motivo por el cual la zona de control se fijó en torno a la factoría Solvay, para lo cual se realizó una malla de 49 muestras que abarcaba unos 12 kilómetros cuadrados alrededor de dicho complejo industrial.

Las pruebas que se han obtenido son "claramente coherentes" con otros controles realizados tanto por Ecologistas en Acción Cantabria como por BioVía en otras instalaciones industriales similares, en las cuales, comparativamente, la de Barreda obtendría unos resultados "menos malos" que otras factorías similares, han afirmado los promotores del estudio.

Sin embargo, los ecologistas han sostenido que el "legado dejado por Solvay de contaminación por mercurio" en éste y otros aspectos a lo largo de sus años de actividad supone "una deuda con los vecinos del entorno que moralmente la obliga a modernizarse y reconvertir su proceso productivo. El cese de actividad a partir de diciembre de 2017, no es una salida aceptable ni justa", han sostenido.

En este sentido, Ecologistas en Acción ha opinado que la tecnología de celda mercurio es una "técnica obsoleta" e "ineficiente", motivo por el que la Unión Europea ha fijado su caducidad en diciembre de 2017, fecha a partir de la cual habrá que o reconvertir a tecnología de membrana más moderna o cerrar la actividad.

Por otra parte, Ecologistas en Acción ha denunciado la "actitud claramente obstruccionista" del Ayuntamiento de Torrelavega, cuya autorización para colocar las muestras "se dilató enormemente". "Lo más grave es cuando nos advierten hasta dónde pueden o no llegar las conclusiones de dicho estudio, en una intromisión claramente injustificada e intolerable. El ayuntamiento de Torrelavega, como siempre, considera que la mejor actitud sobre política ambiental es la del avestruz", han denunciado.

La factoría de Solvay es un “foco emisor de mercurio”
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