En menos de 24 Cantabria ha pasado de una temperatura de más de 20 grados a sufrir los primeros síntomas de los temporales que con relativa frecuencia azotan el norte de España en invierno. En alerta amarilla por lluvias, olas y nevadas, en la mañana de este sábado 21 de noviembre los vecinos de las ciudades costeras de la región se han levantado con las primeras imágenes que ha dejado este temporal.
Una de ellas es la que ha dejado el viento en la Avenida del Faro de Santander, donde ha derribado un árbol que ha causado daños en dos vehículos y que los Bomberos ya han retirado. La Policía Local de Santander ha sido la que, sobre las 8:30 horas de este sábado, ha avisado a los Bomberos de que había un árbol caído que ocupaba "toda la calzada" y que, al caer, había afectado a dos vehículos.
Azotada por la lluvia y el viento, Santander ha sido una de esas ciudades que, desde las 00:00 horas del sábado están en alerta por fuertes precipitaciones, con una acumulación prevista de 40 mm. Con muy pocos santanderinos paseando por la calle, algunos corriendo y otros tratando de resguardarse de las inclemencias climatológicas, la estampa en la ciudad ha sido muy diferente a la vista en días atrás, cuando el sol permitía que las playas acogieran a sus últimos visitantes. Este sábado, solo las gaviotas y las palomas se atrevían a poner una pata en la arena.
Olas por encima de los cinco metros
Cantabria ha registrado este sábado olas de más de cinco metros de altura y que, en las últimas horas, aunque sin llegar a ese valor, se han situado sobre los cuatro metros y medio.
Así lo ha recogido este sábado la boya Augusto González de Linares, que el Instituto Español de Oceanografía (IEO) tiene colocada a 22 millas al norte de Cabo Mayor, y las de la Red de Vigilancia Integral de las Aguas situadas frente a la Virgen del Mar (Santander)y en Santoña .
Las boyas de la Red Vigía son las que están ofreciendo los datos más actualizados, con la altura máxima de ola registrado a las 13.00 horas, que en la de la Virgen del Mar era de 5,28 metros y en la de Santoña de 4,88, respectivamente. Ambas sitúan la velocidad del viento en más de 47 kilómetros por hora.
Por su parte, la boya 'Augusto González Linares', que permite consultar un histórico de la altura máxima alcanzada en las últimas horas, ha registrado olas este sábado de 5,16 metros, sobre la una de la madrugada.
Según la información de la AEMET, la alerta por oleaje en el litoral cántabro está, precisamente, activada desde las 11.00 horas y está previsto que dure hasta las 7.00 del domingo. El oleaje es oeste de fuerza 7 y mar combinada del oeste a noroeste de 4 a 5 metros.
Nevadas y uso de cadenas
El aviso por nevadas afecta a tres zonas: Liébana; el centro y Valle de Villaverde, y en la Cantabria del Ebro. En todas, la probabilidad oscila entre el 40 y el 70%, y se prevé en ellas bajada de cotas hasta 800 o 900 metros.
La nieve ha provocado que, desde el mediodía del sábado, sea necesario el uso de cadenas para circular por la CA-183 (Reinosa-Brañavieja), única carretera que, por el momento, presenta dificultades de circulación a causa de la meteorología.
Concretamente, es necesario el uso de cadenas entre los kilómetros 18 y 24, a la altura de La Lomba, según la información ofrecida por la Dirección General de Tráfico y en la web Carreteras de Cantabria, dependiente de la Consejería de Obras Públicas. Está prohibida la circulación de autobuses, camiones y articulados.
Alerta en 28 provincias
Cantabria es, con esta predicción, una de las 28 provincias españolas que tienen activado este sábado algún nivel de alerta por distintos fenómenos meteorológicos.
En concreto, están en aviso amarillo (riesgo) por olas, además de nuestra región, Almería, Granada, Melilla, Alicante, Castellón, A Coruña, Lugo, Pontevedra, Vizcaya, Guipúzcoa y Asturias; la alerta naranja (riesgo importante) se ha activado en las provincias de Girona, Tarragona, Ibiza, Formentera, Mallorca y Menorca.
Y en lluvias, la alerta amarilla de Cantabria se activa también en Navarra, Guipúzcoa y Asturias.
En alerta por nevadas están Asturias, Huesca, Burgos, León, Palencia, Soria, Lleida, Navarra, Lugo, La Rioja y Álava. Por otra parte, Huesca y Lleida tienen activada la alerta amarilla por temperaturas mínimas que pueden llegar a -6ºC.
Por fuertes rachas de viento están en alerta amarilla Almería, Teruel, Zaragoza, Guadalajara, Segovia, Melilla, Madrid, Navarra, Ibiza, Formentera, Mallorca y Menorca. Por su parte, Huesca, Girona, Lleida, Tarragona, y Castellón, donde se esperan rachas máximas de hasta 100 kilómetros por hora, tienen activada la alerta naranja.
Las precipitaciones serán persistentes en el área cantábrica, el norte de Navarra y el Pirineo occidental, extendiéndose de forma más débil principalmente a los sistemas montañosos del resto de la mitad norte peninsular y al este de Baleares.
La cota de nieve en la Península está prevista en el entorno de los 2.000 a 2.500 metros inicialmente, bajando a 700 y 900 metros en la Cordillera Cantábrica y los Pirineos, y a unos 1.000 metros en el Sistema Central e Ibérico.
Las temperaturas han sufrido un descenso generalizado, que podrá ser notable en zonas altas y en el interior de la mitad este peninsular. Las heladas se esperan en zonas de montaña de la mitad norte peninsular y en áreas próximas, pudiendo ser fuertes en Pirineos.
Finalmente, los vientos soplan de componente oeste girando al norte en la Península y Baleares, con intervalos de fuerte en los litorales de Galicia, del cantábrico y en zonas de montaña, e incluso rachas muy fuertes en el bajo Ebro y en el Ampurdán.
