jueves. 28.03.2024

Una república independiente, con religión propia

Un concepto revolucionario: la república independiente de Ikea. Un pensamiento único: los Ikenianos ¿una religión?. Un lema: “móntatelo tu mismo”.

Todo nació en Älmhult (Suecia) cuando Ingvar Kamprad tuvo la iniciativa de desarrollar un modelo minimalista de decoración y de hogar.  Había nacido Ikea. La localidad sueca tiene en la actualidad 9.000 habitantes, de los que 5.000 trabajan para la multinacional. Älmhult cuenta con un hotel Ikea, un museo Ikea, edificios corporativos… En definitiva, un auténtico parque temático.

Lo que el bueno de Ingvar seguro que no imaginó es que años más tarde su proyecto crecería hasta el infinito

Lo que el bueno de Ingvar seguro que no imaginó es que años más tarde su proyecto crecería hasta el infinito y sus seguidores se multiplicarían por millones.

El mismo sillón, las mismas estanterías, platos y vasos idénticos. Dormir en la misma cama con el mismo edredón. No sabes si estás en tu casa o en la de uno de tus amigos.

Todos siguiendo las flechas, todos comiendo albóndigas, todos con una cinta métrica y un lápiz en la mano.

Un concepto revolucionario: la república independiente de Ikea. Un pensamiento único: los Ikenianos ¿una religión?. Un lema: “móntatelo tu mismo”.

¿Y si fuese así? ¿Y si un buen día los “ikenianos” deciden montárselo ellos mismos y huir de la uniformidad? ¿Y si uno de ellos, una tarde de sábado, toma la decisión de ir en el sentido contrario de las flechas?¿Y si esa tarde no le apetece comer albóndigas? ¿Y si llega a casa y le regala sus cuatro sillas Eames a su madre?

Si esto ocurriese así, en un futuro no lejano podrían existir hogares distintos unos de otros. Con cuadros heredados o comprados en un anticuario. Con una mesa y unas sillas rescatadas de un garaje y rehabilitadas. Sin pizarras con mensajes moñas. Sin edredones en las camas. Con sofás clásicos. Es decir, un hogar con personalidad, con un estilo propio. Un hogar en el que Ingvar Kamprad seguro que copiaría algunas ikeas… Perdón, ideas.

Una república independiente, con religión propia
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