jueves. 28.03.2024

Las 'pindias' cuestas de Santander han sido siempre un sufrimiento. Sin embargo, la llegada de las rampas y escaleras mecánicas, así como el funicular del Río de la Pila y los ascensores que unen la Calle Castilla con la Calle Alta, han permitido una mejora considerable en la accesibilidad de la capital cántabra. 

Desde que se inauguraran las primeras escaleras, la ciudad ha sufrido una transformación importante en este sentido, y actualmente varias zonas disfrutan de estas estructuras que ayudan a "unir y vertebrar" la ciudad y facilitan el acceso a los vecinos, especialmente a las personas con movilidad reducida.

En los últimos diez años, algunas de las instalaciones que ha hecho el Ayuntamiento son las que conectan la calle de Antonio Mendoza y General Dávila, Los Castros y General Dávila, la calle Eulalio Ferrer y la calle Alta o la calle Vargas e Isaac Peral.

Además, el Consistorio ha proyectado otras obras, previstas para las calles Lope de Vega, Gurugú y Vista Alegre.

 

Santander, una ciudad conectada a través de rampas y escaleras mecánicas
Comentarios