La situación política del diputado de Podemos Cantabria, José Ramón Blanco, parece precipitarse más cada día que pasa. Si el pasado viernes 14 de diciembre el Parlamento autonómico revelaba que Blanco había recibido el alta médica un mes antes sin haber acudido a trabajar desde entonces, este lunes el partido ha pedido al que fuera secretario general del partido en Cantabria su dimisión como diputado, solicitando asimismo “la entrega inmediata del acta de diputado”.
“Con este hecho no queremos ni prejuzgar, ni dictar sentencia sobre todas las acusaciones que contra él se han vertido, sino salvaguardar a la organización y sus iniciativas”, ha explicado la formación en un comunicado, pues de lo contrario, es decir, si Blanco mantuviera su acta de la formación, “toda acción o denuncia que llevara a cabo Podemos Cantabria se vería constantemente ensombrecida por estos hechos”.
Por el momento el diputado de Podemos Cantabria no solo no ha devuelto el acta, sino que este lunes ha vuelto, después de más de un mes de ausencia, a la actividad plenaria, ocupando su escaño en el Grupo Parlamentario de Podemos. Este hecho ha provocado que su compañera de partido, la portavoz parlamentaria Verónica Ordóñez, una de las que denunciaron a Blanco por acoso, se haya visto obligada a solicitar un cambio de asiento, extremo que ha sido aprobado por el Legislativo. Ordóñez ha ocupado un escaño junto a los parlamentarios del PRC.
