Comisiones Obreras de Cantabria ha alertado de la existencia de "al menos" un positivo por coronavirus en Renfe y ha denunciado la "dejadez" de Eupraxia, la empresa concesionaria del servicio de taquillas de billetes en las instalaciones ferroviarias, por "no activar" los protocolos establecidos y no aislar a los contactos directos de la plantilla, con el "riesgo" que esto supone para los demás trabajadores y usuarios del servicio.
El portavoz de CCOO incide en la "falta de medidas de seguridad e higiene" cuando "no se llevó a cabo la desinfección de los lugares donde había trabajado esta persona"
"Renfe y la administración no deben permitir actuaciones tan negligentes que conviertan una dependencia de un servicio público en un foco de transmisión de Covid-19", ha señalado la Federación de Servicios a la Ciudadanía del sindicado y el responsable en el sector ferroviario, Manuel Celis.
En un comunicado, señala que el pasado 11 de septiembre se detectó "el primer caso positivo" de Covid-19 en una persona de la plantilla tras realizarse la prueba PCR. Además de notificar su caso, identificó a dos compañeros con los que había mantenido contacto directo tras trabajar en el mismo turno y compartir espacios comunes y diferentes equipos informáticos. En ese momento, CCOO solicitó a los responsables de Eupraxia -que cuenta con más de una veintena de trabajadores- que "de forma inmediata" activara los protocolos de seguridad establecidos por Renfe y que, como empresa que presta un servicio, "tiene obligación de conocer y asumir".
Este procedimiento, que se ciñe a lo determinado por el Ministerio de Sanidad y por el Gobierno de Cantabria, establece la obligación de aislar, poner en cuarentena y realizar la prueba PCR a cualquier persona que haya tenido contacto directo con un positivo en la enfermedad, así como la desinfección de las dependencias afectadas.
Pero según el sindicalista, "Eupraxia utilizó la táctica del avestruz: escondió la cabeza y esperó a que sucedieran los acontecimientos". "Lejos de activar protocolos y tomar las medidas exigidas, derivaba a los trabajadores a sus médicos de cabecera para que este tomara las medidas que creyera oportunas". La empresa, insiste Celis, "debería haber activado sus servicios de prevención y proceder al relevo de los trabajadores para el aislamiento" y, sin embargo, "en cuanto los profesionales eran asistidos por la sanidad pública, debían ir a su puesto de trabajo, sabiendo que eran contactos directos y sin saber si era positivos".
Respecto al lugar de trabajo, el portavoz de CCOO incide en la "falta de medidas de seguridad e higiene" cuando, al conocer la existencia de un caso positivo, "no se llevó a cabo la desinfección de los lugares donde había trabajado esta persona". Además, denuncia, "se obligó, incluso, a trabajar y utilizar las instalaciones contaminadas hasta el sábado a media mañana". El representante del sector ferroviario en CCOO denuncia la "falta de compromiso" de la empresa Eupraxia con sus trabajadores y con los usuarios del servicio.
