El número de trabajadores afectados por expedientes de regulación de empleo (EREs) autorizados por las autoridades laborales o comunicados a las mismas subió un 183,9% en 2019 en Cantabria en comparación con 2018, el mayor incremento de todas las comunidades autónomas –y 162 puntos por encima de la media estatal, que fue del 22%–, y sumaron 1.970 afectados en Cantabria, según datos del Ministerio de Trabajo y Economía Social.
Cantabria encabeza el incremento estatal tanto de despidos colectivos como de suspensiones de contrato
Por tipo de procedimiento, el número de trabajadores afectados por despidos colectivos se disparó un 204,3% en tasa interanual en Cantabria, hasta sumar 280 trabajadores afectados. Se trata del segundo mayor incremento de todas las comunidades autónomas tras el de Canarias (226,1%) y casi cuatriplica el incremento estatal (54,7%). Por su parte, las suspensiones de contrato afectaron a 1.632 trabajadores, un 202,8% más, nuevamente el mayor aumento de todas las comunidades autónomas, donde la media fue del 12,1%. El único dato positivo para Cantabria fue la reducción de los afectados por expedientes de reducción de jornada, que bajaron un 7,9% –en España bajaron un 23,2%–, hasta los 5.000 trabajadores.
Por comunidades autónomas, la que registró un mayor número de trabajadores afectados por regulaciones de empleo en 2019 fue la Comunitat Valenciana, con 27.494 trabajadores implicados, cifra un 52,6% superior a la del mismo periodo de 2018. Casi todos los trabajadores afectados en esta comunidad autónoma se vieron inmersos en un ERE de suspensión de contrato (24.458). En ello han tenido mucho que ver los EREs temporales de suspensión de contrato que se aplicaron a lo largo del año pasado en la factoría de Ford en Almussafes. Tras la Comunitat Valenciana destacan Madrid con 13.498 afectados por ERE durante del año pasado (+14%), Cataluña con 11.898 (+78%) y Andalucía con 5.289 afectados (+32%). El número de trabajadores afectados por ERE bajó en 2019 en cinco comunidades autónomas y subió en 12 y en Ceuta y Melilla. Los mayores descensos se los anotaron Navarra (-77%) y La Rioja (-38%), mientras que los mayores ascensos correspondieron a Cantabria (+184%), Castilla y León (+88%), Canarias (+85%) y Cataluña (+78%).
