jueves. 28.03.2024

Todos aquellos que en los últimos días han recorrido la calle Consolación de Torrelavega se han encontrado con un viaje al pasado. Una recreación elaborada de manera conjunta entre la Cristalería Robledo y el Bar Central que traslada a los viandantes al año 1895, fecha en la que se inauguró el Ferrocarril del Cantábrico, que servía para unir Santander y Cabezón de la Sal. Un paso adelante marcado en rojo en los libros de historia para las comunicaciones e infraestructuras de los vecinos de toda la zona. 

Se trata de un hito muy importante para la capital del Besaya, ya que como rezan los carteles expuestos, gracias a esta conexión se conseguía que en la época se tardase una hora y cinco minutos en completar la distancia que separaba Torrelavega de Santander con un precio del billete de ida y vuelta de una peseta. Sin lugar a dudas la instalación ha levantado una gran expectación entre vecinos y visitantes que pueden ver una representación del ferrocarril, también de la taquilla y del cuadro de mandos. 

Representación del ferrocarrilRepresentación del ferrocarril​

125 ANIVERSARIO

Además, esta actuación sirve también para conmemorar el 125 aniversario de la concesión del título de ciudad a Torrelavega. Esta acción se llevó a cabo por orden de la Reina María Cristina, regente en la época el 29 de enero de ese mismo 1895, y la actuación tuvo lugar después de que se registrase un importante crecimiento de la población promovido por el progreso que estaba experimentando la zona a nivel industrial. Así, el mismo reconvirtió la economía de la cuenca del Besaya marcando el futuro exterior de Torrelavega y de sus vecinos. 

La calle Consolación de TorrelavegaLa calle Consolación de Torrelavega

Un viaje en tren hacia el pasado
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