Según una definición al uso, “implícito”, del latín “implicitus”, es algo que se encuentra incluido en otra cosa o actividad, sin que esta lo exprese o manifieste de forma directa, pero qué sin dudarlo, se encuentra comprendida entre otras muchas obligaciones llamadas a realizar por la Administración Central, pretérita o actual, sobre todo, si las pertinentes “acciones” quedaron convertidas en “inacciones”.
O sea, dicho en ROMAN PALADINO, la situación descrita por un Medio local muestra una situación, clara, simple, concisa, sin adornos o complicaciones, referente a la descripción de un lugar, producida por problemas económicos, desidia, desinterés, etc. y no necesariamente por este orden.
Todo lo que ocurre nos preocupa, pero en especial la existencia de esos “Vertederos Indomables”, problema endémico en todo el territorio español
También, EL DIARIO DE CANTABRIA, en 2015, se hizo eco de movilizaciones de vecinos y colectivos. Constitución de Asamblea reivindicando ante la extinta Dirección de Costas y otras Instituciones locales y autonómicas.
Vuelve a retomarlo en esta ocasión, identificándose el problema, con una de las situaciones típicas de algunas Administraciones, desconociendo el porqué, respecto a “dejar en reposo indefinido” en cualquier anaquel algún expediente, si sobre todo pudiera afectar a la salud, venido en suerte, sin existir, que sepamos explicación plausible al largo tiempo transcurrido desde sus inicios.
Al respecto, el ciudadano medio ya debería haberse acostumbrado al surgimiento de este tipo de situaciones, producto de las penumbras presupuestarias y sombras de improductivas, inercias de la Administración, sea cual sea su signo político, arriesgándose como contribuyente, dicha sea la suerte, al quebranto doméstico que supongan sus desembolsos fiscales.
Este Autor vive muy de cerca a través de la autoría de sus Artículos (www.modificadosobraspublicas.com), los problemas de CANTABRIA, y les puedo asegurar que dicha región, no supone ninguna excepción dentro de los múltiples dislates que vienen ocurriendo a lo largo y ancho de España durante las últimas gobernanzas.
Todo lo que ocurre nos preocupa, pero en especial la existencia de esos “Vertederos Indomables”, problema endémico en todo el territorio español, así, como frecuentes y condenatorios por las Instituciones europeas, por su riesgo contra la salud humana, la cual recaba especial atención desde estas páginas, dirigida a las autoridades responsables.
¡Mucha suerte también con esto, queridos amigos Cántabros!