CCOO ha anunciado este sábado su intención de convocar paros en Renfe y Adif durante los próximos cuatro meses, entre junio y septiembre, coincidiendo con las vacaciones de verano, para manifestar su rechazo al actual modelo de ferrocarril, y reclamar más personal y la recuperación de los salarios de los empleados de ambas compañías.
El sector ferroviario de CCOO –uno de los sindicatos mayoritarios en ambas empresas- ha manifestado en un comunicado su intención de sumar a sus paros al resto de sindicatos con representación en Renfe y Adif, dado su "convencimiento de que coinciden en el análisis de la situación y en la necesidad de pasar a la movilización".
En concreto, el sindicato denuncia la disminución del número de empleados que acumulan Renfe y Adif y reclama un "plan plurianual de empleo que suponga mayores ingresos de trabajadores que los registrados en los últimos años para rejuvenecer las plantillas y garantizar la prestación de servicio".
CCOO también reivindica una "recuperación" de los sueldos de la actual plantilla que, según ha indicado, ha perdido un 5% de poder adquisitivo "tras cinco años de congelación salarial y otros dos subiendo al 1%".
Además, denuncia el actual modelo ferroviario "basado sólo en el AVE" y en "golpes publicitarios con promesas de inversiones".
En este sentido, también manifiesta su rechazo a las externalizaciones de trabajos, como los de mantenimiento y los de venta de billetes, y a la situación del negocio de transporte de mercancías en tren, y denuncia la "inconcrección" del nuevo acuerdo con el Estados sobre prestación de servicios públicos, pendiente aún de firmarse desde su aprobación en diciembre de 2017.