La reforma laboral al Constitucional

5 de febrero de 2022, 20:52

Manuel seguía dándole vueltas a lo ocurrido en la oficina del banco, y no le cabía en la cabeza el maltrato de los bancos a las personas mayores. ¿Cobrarte por sacar tu propia pensión? ¿Qué será lo próximo?, y luego a los políticos se les llena la boca de la necesidad de proteger a este colectivo mientras permiten estas fechorías. El Banco de España, esa institución que siempre ve como un problema subir el SMI, pero no es capaz de supervisar el abuso de las entidades financieras con los más débiles.

Abrió la puerta trasera de su Land Rover, que había dejado en el aparcamiento del supermercado, y cogió una bolsa, dirigiéndose al mismo. Se sentía incómodo entre tantas personas, ruido y colores, esa publicidad que te meten por los ojos los productos, y esa música que incluso marca el ritmo al que tienes que hacer una compra.

Recordaba los consejos de su mujer, que en vida hacía menos caso, pero que ahora, la tenía en su memoria. "Lleva una lista, que si no acabarás comprando lo que ellos quieren y no lo que tú necesitas" "ten cuidado con las ofertas y las cosas que están a la altura de tus ojos, eso es lo que ellos te quieren vender y te lo meten por los mismos".

El recordar sus consejos era como tenerla presente, se había convertido ya en una forma de actuar, era como si ella pensara, a veces, por los dos. Él siempre creyó que su mujer era más sensata, Manuel se preocupaba poco de estas cosas y ahora, casi ante cualquier duda, se hace la misma pregunta ¿qué haría mi mujer?.

Fue llenando el carrito de las compras, mirando su lista, y medio cabreado cuando no encontraba las cosas, o él consideraba que se las habían cambiado de sitio. Es como si nos quisieran tener aquí dando vueltas hasta que compremos medio supermercado. Cogió sus yogures, el chocolate, pero que tenga poco azúcar y más de 70% de cacao, el chocolate era su perdición, su sabor le transportaba hasta su niñez, cuando una tableta de chocolate era un tesoro.

En aquellos tiempos lo traían de la ciudad los familiares, los que la vida les sonreía. Recordaba aquel sabor que le había quedado grabado en su mente para siempre, sabe que come más de lo necesario, pero se dice que la vida es muy dura si uno no se puede permitir algún pequeño capricho. Le salía una sonrisa recordando que el chocolate era un sucedáneo de sexo.

Cuando ya se dirigía a la caja, una voz le sorprendió.

Hola Manuel, ¡tú por aquí!, ¡qué caro eres de ver!

Era su viejo amigo Andrés, él vivía en un pueblo cercano, habían sido compañeros en la mili, allí crearon un vínculo de amistad que siempre han mantenido, no se veían mucho, pero se tenían un gran aprecio.

Amigo Andrés, que bien te veo, ¿qué tal la familia?
Bien, dentro de lo que cabe, nos vamos haciendo mayores y los problemas vienen solos, pero sabes que soy de los que no me gusta mucho recrearme en ellos. Así que mejor la versión corta. ¡Bien, amigo Manuel!
La pregunta era de cortesía, que te conozco, que a ti para soltar un mitin te hace falta poco.
Dicho esto, se le escapó una carcajada sonora, que Andrés acompañó a coro.
No pierdes el tiempo para meterme el dedo en el ojo, ¿eh?
No, que debes estar de enhorabuena, que tu partido ha conseguido aprobar la reforma laboral y encima gracias a un voto del PP.
Eso ha sido el karma que les ha castigado.
Bueno, pero vaya susto que os habéis llevado cuando Maritxell ha dicho que no salía la reforma.
Bien está, lo que bien acaba, y si es de penalti injusto en el último momento mejor.
Igual no ha acabado, me dicen que la reforma laboral puede acabará en el Tribunal Constitucional, por una posible violación de los derechos fundamentales del parlamentario que supuestamente se equivocó.
Para cuando se pronuncie el Tribunal Constitucional igual ya estamos en otra reforma laboral.
Mira que me ha sorprendido ese resultado tan justo, cuando hay un acuerdo entre agentes sociales. Por una parte, la derecha, la patronal, y por otra la izquierda, los sindicatos, y al final cuando se lleva al Congreso, logra tan pocos apoyos, para mirárselo. Más de nueve meses de negociación encabezados por Yolanda Díaz, todos cedieron para llegar al acuerdo. En el Congreso cada uno pide su parte y esos acuerdos son más complicados. Ahora bien, aquello de que todos son iguales no es justo, que los ciudadanos saquen sus propias conclusiones.
Manuel, tú sabes que la política hace extraños compañeros... incluso en la reforma laboral, así Vox y PP votando juntos con Bildu y ERC
Tienes razón, lo importante es recuperar derechos de los trabajadores, pero los intereses del partido, parecen que van por encima del interés general.
Como echaba de menos nuestras conversaciones, con un vaso de vino y arreglando el país.
Ven a hacerme una visita, ya sabes que estoy más solo que la una, allí en el pueblo.
No te preocupes, pronto vienen las municipales y las autonómicas e iré a pedirte el voto.

Se lo decía con una sonrisa de oreja a oreja.

Pues ya os lo podéis trabajar porque cada vez estamos más olvidados, y acabo de venir del banco donde me han estafado, dicen que "legalmente".
Pero eso es una historia larga que ya debatiremos, a ver si podéis poner algo en vuestro programa.
Ya sabes, ahora yo pinto poco en el partido, soy un militante de base.
Bueno amigo, me debes esa visita, llevamos mucho tiempo de cháchara y de pie, y todavía me quedan unas cuantas gestiones antes de volver al pueblo. Tú como estás aquí al lado, lo tienes todo a mano.
Si, pero y lo tranquilo que vives tú allí en la montaña, en plena naturaleza, siempre fuiste un ecologista de corazón. Aquellos tiempos en la mili, cuando te cabreabas si matábamos hormigas, ja,ja, nunca los podré olvidar. Dales saludos a Gero y Marta, pero más cordiales para Marta, que Gero sigue siendo un palo seco, ella es una santa. Tú cuídate mucho, sabes que si necesitas algo solo tienes que llamarme.
Lo sé amigo, lo sé y te lo agradezco, nos vemos cuando quieras.
Chocaron las manos como hace más de 50 años y se despidieron con una palmadita en la espalda.

Manuel se puso en la cola de la caja, se dijo para sí mismo "en esta ciudad se pasa uno media vida en las colas". Seguía con los pensamientos sobre lo que había hablado con Andrés y lo que había oído en la radio sobre la reforma laboral. Él tenía un alto concepto de la lealtad, de la palabra dada, así que ver cómo se había convertido en un mercadeo, buena parte de la actuación política, le producía un profundo rechazo.

Si el error del diputado del PP, Alberto Casero, era lamentable, lo era mucho mucho más la actuaciones de los UPN, Sergio Sayas y Carlos García Adanero, haciendo "una de transfuguismo del voto", apoyando lo contrario de lo acordado la dirección de su partido, la cual les mandaba votar a favor de la reforma laboral para que no reprobaran al alcalde de Pamplona, ¡¡Qué narices tendrá que ver el alcalde con la reforma laboral!, vamos despropósito total por parte de todos.

Cada vez que hay una votación importante, sea una ley, convalidar un Real Decreto-ley , la propia ley de presupuestos... la mayoría de las negociaciones son sobre ¿qué hay de lo mío?, y esto se ha ido normalizando, ahora el voto de los representantes de la voluntad popular se convierte en el voto por su interés, a veces pueden ser espurios o puro clientelismo.

Esto lo que hace es sembrar las semillas de la corrupción, ya que cuando falta la ética en el proceder de los que mandan, más cerca están los daños que tanto hemos sufrido en nuestro país...