15 de noviembre de 2023, 20:48
El amnésico soldado regresaba de las trincheras con alas de plomo en el vientre. La muerte afilaba su cuchillo sangriento. Antes de despedirse de este despiadado mundo entró en una cantina a beber cantidades ingentes de vodka, su bebida favorita.
Mientras se entrecruzaban la puntería de la metralla y el camino curvo, se desvistió el uniforme militar. Cayó jadeando al suelo. Su último aliento fue el de toda la humanidad.