Los cañones de nieve artificial de Alto Campoo ya están en la estación de alta montaña cántabra, "preparados" para su uso, pero sólo podrán funcionar cuando las temperaturas bajen a dos grados bajo cero. Así, el mercurio del termómetro deberá situarse entre -2 y -4 ºC, el "umbral mínimo" para que la nueva instalación –que ya ha sido sometida a "pruebas oficiosas"– funcione correctamente y produzca nieve.
Así lo ha reconocido este miércoles el consejero de Turismo del Gobierno autonómico, Francisco Martín, quien ha indicado que usar los cañones por encima de las citadas temperaturas sería "un esfuerzo inútil", ya que su finalidad depende del frío. De este modo, se han hecho pruebas con los cañones, que "funcionan" correctamente en el sentido de que captan y pulverizan agua, pero su función última no sólo tiene que ver con la técnica, sino también con la temperatura, de ahí que tendrán que probarse de nuevo cuando los termómetros bajen de cero grados.
En este sentido, Martín ha destacado que la Navidad de este año está siendo "atípica" en lo que a lo meteorológico se refiere, con temperaturas próximas a los 15 grados en la comunidad autónoma, y ha confiado en que las condiciones del tiempo cambien a partir de los próximos días para que la estación de Alto Campoo y sus cañones funcionen. Y es que mientras no abran las instalaciones y funcionen los cañones, habrá "oportunidades y dinero perdido", ha admitido el consejero, que calcula que la generación de nieve artificial en las pistas incrementará en torno a un 30% los días esquiables en la estación de alta montaña de Cantabria.
