La Policía Nacional ha realizado en Santander el primer simulacro 'AMOK', de situación violenta en la que un agresor emplea cualquier medio para atacar a un colectivo o a la población, y que puede perpetuarse con armas -blancas o de fuego- o incluso un vehículo.
En concreto, se ha llevado a cabo el miércoles por la noche en el centro comercial El Alisal, donde se ha recreado un atentado terrorista, y se ha contado con la participación de un total de 130 personas: 80 agentes y 50 empleados y personal de seguridad del establecimiento.
El objetivo de esta actividad policial es "mejorar la capacidad de reacción y actuación" de los primeros agentes intervinientes en incidentes 'AMOK' en los que, por lo general, los atacantes no tienen un plan de huida ya que asumen que perderán la vida durante la agresión y se centran en causar cuanto más número de muertes mejor. La existencia de un incidente de estas características requiere de una actuación "rápida y efectiva para frenar y neutralizar el ataque", destaca la Policía que, ante estos supuestos, activa un protocolo que "da órdenes claras y contundentes de cómo actuar y en el que cada segundo es crucial".
