domingo. 28.04.2024

Sin lugar a dudas Cantabria es una tierra recolectora. Nuestros antepasados ya se dedicaban a esta actividad tan laboriosa para poder llevar alimentos al hogar, como frutas o verduras que son, a su vez, indispensables en nuestra dieta. Y es que, ¿quién no ha recogido moras o castañas en familia cuándo era pequeño? De esto sabe mucho Fernando y el proyecto Walden Berries, ubicado en Cudón, que se ha convertido sin lugar a dudas en una actividad con un éxito rotundo.

"De niños siempre íbamos a recoger moras y nos lo pasábamos muy bien". Por eso, Fernando inició un camino para que la gente conociese qué significa recoger arándanos, los beneficios y, el esfuerzo que implica esta labor.  Desde hace cuatro años, todo aquel que quiera puede acudir a Walden Berries a recoger arándanos en su plantación.

"No empecé esto con mucha esperanza, pero resultó ser todo un éxito", comienza explicándonos. Una idea que surgió al ver lo disparados que estaban los precios de mercado de este fruto del bosque. "No estaba muy contento con los precios que se pagaban por los arándanos  en el mercado y como a mí siempre me ha gustado recoger pensé que igual a los demás también", explica Fernando, poniendo en valor el  "precio asequible" que ofrece para que las personas puedan recoger y, además "probar el producto de primera mano".  También es una manera de hacer ver a la gente "lo laborioso que es esta práctica" y por qué tienen ese precio.

 

Sobre cómo recoger el arándano, Fernando, que lo conoce desde niño, nos ha explicado cómo se desenvuelven las personas que acuden a esta actividad, que no deja indiferente a nadie. "Aquí les damos el material -como a los recolectores profesionales-, que consta de unas jarras que se pueden anudar al cinturón y así puedes ir con las dos manos libres para poder recoger con soltura", explica este amante de la recolección, poniendo de ejemplo el hecho de recoger moras, pero "sin que nos pinchemos", bromea Fernando.

En cuanto a la clase de arándanos, el azul es el que predomina en Cantabria gracias a que los suelos son muy ácidos, "es raro que no haya", añade. En este caso, además, las condiciones meteorológicas que se dan aquí son óptimas para que estos frutos puedan servirnos de almuerzo.  "Los arándanos necesitan unas 700 horas de frío, más o menos, algo que podría cumplirse en Cantabria", indica.

Para que podamos ver un arándano en nuestra plantación, basta con que pase un año, aunque sería una "cantidad mínima". "Hace una década, a la hora de cultivarlos, en los dos primeros años se les quitaba la flor para que no gastase energía en el fruto y se centrase en crecer, así, el tercer año ya se le deja que empiece a producir", explica Fernando sobre la manera de trabajar. Además, indica que en máxima producción, puede tardar en completar el proceso hasta siete años.

“La gente viene a esta actividad por muchas cosas, el precio, la fruta, que al estar recién cogida tiene más calidad… “, añadiendo también el buen rato que puedes pasar en familia, con amigos o solo, una manera para muchos también de “aliviar el estrés”.

Por ello, en los terrenos de Walden Berries trabajan todos los días de la semana, incluidos festivos. Actualmente, todavía es temporada de recoger este fruto del bosque por lo que Walden Berries continúa teniendo abierta esta actividad y nos ofrece la posibilidad de traernos arándanos a casa.

Recoger tus propios arándanos: una experiencia única que puedes encontrar en Cantabria
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