lunes. 29.04.2024

El coworking, que ya es un término de uso común, es un fenómeno que se ha incorporado a la vida cotidiana de muchos trabajadores en los últimos años.  

Se trata de una nueva forma de trabajar que consiste en compartir un espacio entre profesionales de diferentes sectores y empresas, con el fin de abaratar costes y beneficiarse de todos los servicios necesarios para funcionar de la mejor manera posible, manteniendo al mismo tiempo su propia actividad independiente.

Estos espacios se organizan con un espacio abierto común con varios puestos de trabajo personales y zonas compartidas (sala de reuniones, sala de descanso, sala de espera, cocina, etc.) y ofrecen todos los servicios que necesita un profesional: Wi-Fi, impresoras, fax, teléfonos fijos, servicio de recepción, sistema de climatización, gestión de correspondencia, etc.

Estos espacios suelen estar gestionados por empresas especializadas o plataformas online como Joivy, que ofrecen soluciones profesionales para todas las necesidades laborales. 

El coworking está ya muy consolidado entre autónomos y profesionales obligados a desplazarse por trabajo, pero cada vez son más las actividades consideradas “tradicionales” que optan por este innovador estilo de trabajo.

LA OPINIÓN DE JOIVY SOBRE LOS BENEFICIOS DEL COWORKING

El primero en hablar de coworking en relación con un espacio de trabajo compartido fue Brad Neuberg, un programador que creó un espacio que trabajadores independientes y profesionales podían compartir en San Francisco en 2005. El coworking demostró de inmediato los considerables beneficios que podía generar este nuevo modelo de trabajo.

En primer lugar, la posibilidad de trabajar de forma independiente, pero en un entorno estimulante y creativo, rodeado de otras personas motivadas y apasionadas, lo que permite compartir habilidades y recursos y crear sinergias y colaboraciones.  

Otra ventaja es la flexibilidad: el coworking no obliga a contratos de alquiler largos y vinculantes, como ocurre con las oficinas clásicas, sino que permite “alquilar” los puestos de trabajo sólo cuando se necesitan, con paquetes semanales y mensuales muy cómodos y con acceso permitido a menudo 24 horas al día, 7 días a la semana.

El aspecto económico también es una ventaja decisiva: el coworking, al proporcionar puestos de trabajo ya montados, no requiere la compra de todas las herramientas y accesorios que suelen ser necesarios para organizar una oficina. Además, el alquiler a un coste fijo permite ahorrar en gastos, servicios y gestión.

LA EVOLUCIÓN FUTURA DEL COWORKING DESDE EL PUNTO DE VISTA DE JOIVY

Con el auge de la tecnología digital y el trabajo a distancia, pero también el deseo de trabajar de una forma más flexible y menos tradicional, se espera que el Coworking continúe su increíble ascenso en los próximos años. 

Esto podría llevar a la aparición de Coworking especializados, con profesionales internos verticalizados en sectores específicos. 

Además, las predicciones hablan de que el Coworking se extenderá fuera del centro de las ciudades, hacia los suburbios y las zonas rurales, para permitir a la gente vivir y trabajar sin tener que desplazarse demasiado lejos y disminuyendo la demanda de alquileres en las zonas urbanas centrales.

Otra posible implicación es el coworking artístico, con espacios compartidos explotados por artistas como fotógrafos, realizadores de vídeo y productores de podcasts, pero también por los “nuevos creativos”: redactores web, gestores de redes sociales, RRHH digitales, gestores de comercio electrónico, etc.

Sea cual sea el camino que tome el Coworking del mañana, recurrir a plataformas online como Joivy, donde uno puede elegir su propio espacio de trabajo dentro de hubs multifuncionales, permite disponer de un espacio de trabajo seguro, conocer a una comunidad rica y establecer contactos de una forma innovadora y de alto rendimiento.
 

El futuro del Coworking según Joivy
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