El próximo jueves 25 de enero la sala CASYC (C/Tantín 25) acogerá la presentación de ‘Tinta Salvaje’, el cuaderno de campo del artista reinosano Nacho Zubelzu, que cuenta con una cuidada selección personal con más de 250 obras suyas.
Un cuaderno que se compone tanto de bocetos iniciales, resultado de la observación directa en pleno medio natural y producto de infinitas esperas en el campo o en medio del bosque bajo el camuflaje, como una galería de dibujos más acabados en la intimidad de su estudio y basados en las observaciones previas, así como en la documentación fotográfica y científica de cada especie perteneciente a la fauna cantábrica.
Con el libro de Nacho Zubelzu, la editorial cántabra Contenidos arranca la temporada editorial de Cantabria con una propuesta visual que no va a dejar indiferente a nadie, y que cuenta además, con textos de José Luis Gallego (naturalista, periodista ambiental, escritor y divulgador); Sol de la Quadra-Salcedo (Arquitecta, fotógrafa, guía de espacios naturales y divulgadora científica); Esteban Ruiz (sociólogo y editor) y Beltrán de Ceballos Vázquez (Naturalista y consultor especializado en la conservación de las aves. Director de la Fundación Doñana y de la Fundación Victoria Laporta Carbonell)
Para Nacho Zubelzu, la inquietud creativa, su curiosidad, afán investigador y estrecho dialogo con la naturaleza, han constituido siempre las señas de identidad de una trayectoria artística, siempre ligada a su faceta naturalista.
La presentación será a las 19:30 horas y la entrada es libre hasta completar el aforo.
NACHO ZUBELZU
La vida de Nacho Zubelzu está marcada por su pasión por el arte y la fascinación por la naturaleza que le produce el entorno donde vive: el Valle de Campoo, en Cantabria. Su obra se nutre de experiencias propias como creador nómada, y es capaz de plasmar los resultados de sus procesos creativos en soportes tan variados como pinturas, fotografías, esculturas, instalaciones de gran formato, performances y cuadernos de campo y observación.
En los últimos años, su trabajo está muy influido por sus viajes a países africanos (Kenia, Gambia y Marruecos) y asiáticos (China, Nepal, Mongolia o Vietnam), o a parajes de naturaleza desbordante, como el desierto de Atacama en Chile o los Andes peruanos; lugares donde aprehende el perfil y la huella, la esencia de la naturaleza y de la actividad cotidiana de las gentes con los que se encuentra y convive. Con sus “orogramas” cicatriza las fracturas de lo olvidado, de lo que el paso del tiempo ha deteriorado, devolviendo al objeto o entorno la dignidad perdida. Otra fuente importante de su inspiración es la trashumancia, que ha practicado en numerosas ocasiones con pastores nómadas de Extremadura y Andalucía, conduciendo ovejas y vacas por las cañadas españolas, en busca de las dos primaveras.
En sus últimas performances, Nacho se ha “sembrado” como una semilla en espacios urbanos y áreas naturales. Dejando que la tierra lo acoja y alimente, para germinar vigoroso a partir de la acción de los espectadores, que lo han abonado y regado con valores de carácter humanista y creativo. Nacho Zubelzu ha mostrado su trabajo en galerías y ferias de arte contemporáneo de Bologna y Roma (Italia), Tangsham y Beijing (China), Alemania, Portugal, Luxemburgo, Madrid, Santiago de Compostela, Valladolid o Santander. Ha obtenido el Premio Artes Plásticas “Mejor Artista Cántabro” en el 2004 y en el 2019, y su obra está incluida en numerosas colecciones públicas y privadas de carácter internacional
