viernes. 10.05.2024

La Guardia Civil se ha hecho cargo de la investigación de la muerte de un hombre de 66 años el pasado sábado 18 de febrero. Todo apunta a que el fallecido fue atacado presuntamente por los cinco perros de raza peligrosa de su vecino en una finca Beniarbeig (Alicante).

El dueño no tiene documentación ni permiso para poseer razas peligrosas, y si la autopsia y los análisis de AND demuestran que han sido estos perros los causantes de la muerte será acusado de un delito de homicidio por imprudencia, según publica Navarra.com.

Ha sido el hijo el que ha encontrado el cadáver del hombre, al que fue a buscar al no tener noticias de él después de que hubiera salido de casa a pie para ir a un pequeño huerto que tenía en la finca. El cuerpo sin vida estaba lleno de desgarros producidos por las dentelladas de los animales.

El cuerpo sin vida estaba lleno de desgarros producidos por las dentelladas de los animales

Según las primeras pesquisas, los perros comenzaron atacando al hombre mordiéndole las piernas para derribarlo, y las heridas en piernas y brazos hacen pensar que trató de defenderse hasta el final. Los desgarros producidos por las mordeduras en piernas, brazos y en la cabeza pudieron causarle la muerte por pérdida de sangre.

Los agentes comprobaron que la muerte podía haber sido causada por el ataque de varios animales, ya que en el suelo se veían algunas huellas que hacían pensar en una jauría de perros de razas peligrosas, al no existir depredadores salvajes capaces atacar hasta la muerte a humanos en la zona.

Por ello, revisaron las incidencias con perros de la zona, y se dirigieron a una casa cercana. El inquilino tenía varios perros, según habían denunciado algunos testigos. Al llegar a la casa, el dueño reconoció tener varios perros, que en ese momento estaban dentro de la casa, y los fue sacando uno a uno, según el citado medio.

Los agentes comprobaron que se trataba de cinco perros, de razas mestizas de pitbull y bullterier. Los perros no tenían manchas de sangre, pero se percataron de que uno de ellos estaba empapado, como si lo acabaran de bañar, aunque el dueño alegó que se había caído a la piscina.

Antecedentes

Solo uno de los perros tenía chip identificativo, y el dueño no tenía documentación de ninguno, autorización para su posesión, ni seguro de responsabilidad civil. Además, la Policía Local tenía constancia de antecedentes de algún ataque anterior pero con menores consecuencias.

Agentes de Policía Judicial de la Guardia Civil de Jávea tomaron muestras de AND a cada uno de los perros, que fueron depositados en centros de acogida de la zona por miembros del Seprona. La noche del domingo al lunes mordieron a uno de los cuidadores, y han destrozado la jaula donde se encontraban pasando la noche.

Muere tras ser atacado a dentelladas por los cinco perros de raza peligrosa de su vecino