El secretario general del PRC y expresidente cántabro, Miguel Ángel Revilla, cree que Pedro Sánchez ha conseguido unir al PSOE al decidir parar para reflexionar si continuar o no al frente del Gobierno central, pero duda de que haya logrado aglutinar a la mayoría de los ciudadanos.
"Esto, yo creo, polariza todavía más la vida política de los españoles. La oposición va a ser durísima", ha augurado el regionalista en declaraciones a los medios tras conocerse la decisión de líder de los socialistas de seguir en el Ejecutivo.
En este sentido, Revilla ha confesado que se ha "equivocado", pues estaba "convencido" de que Sánchez "iba a dimitir", e incluso en el discurso institucional que ha pronunciado esta mañana, "en su primer minuto, todo me hacía pensar que la siguiente palabra es 'me voy'".
El expresidente de Cantabria (durante varios gobiernos, los últimos de coalición con el PSOE) ha achacado la decisión de Sánchez al "pánico" en el que ha "entrado" el PSOE, "un partido absolutamente personalista" en el que "aparentemente" y "a corto plazo" no hay un relevo, "como puede haberlo en el Partido Popular", ha comparado. "Supongo que en estos días le han sometido a presiones tremendas", ha reflexionado Revilla, que cree así que han transmitido a Sánchez que es "una insensatez" dejar en estos momentos el Gobierno y a un partido "que tiene que empezar a buscar en el horizonte a un sucesor".
DESAYUNARSE UN SAPO A LA PLANCHA
En cuanto a los motivos esgrimidos por Pedro Sánchez para suspender su agenda y meditar si merecía la pena continuar -las denuncias e investigación judicial a su esposa, Begoña Gómez-, el regionalista cree que es una "disculpa", porque los "ataques a la familia es algo que todos hemos sufrido", incluido él.
"Esos temas hay que tenerlos asumidos: se pueden plantear en cualquier momento" y "aquel político no esté en condiciones de levantarse por la mañana algún día y tener que desayunarse 'un sapo a la plancha', no está capacitado para el tema de la política", ha opinado Revilla.
Así, a su juicio, ese motivo era "la coartada para irse", porque "probablemente pensara en irse" cuando pidió parar y reflexionar, pero el PSOE ha reaccionado de una manera "tremenda para conservar lo que tiene", el Gobierno de España, "que no es poca cosa".
La decisión de Sánchez, en palabras de Revilla, ha unido a un PSOE que "ha respirado aliviado" porque hay "muchos cargos en juego y no hay liderazgos previsibles", lo que abocaría a un "partido dividido en banderías", aunque su continuidad en Moncloa "no va a calmar las aguas" porque "el problema de fondo sigue siendo el mismo: un Gobierno de una coalición que no debiera haberse hecho nunca".
EL PECADO ORIGINAL DEL GOBIERNO: LOS SOCIOS
Al hilo, Revilla se ha referido al "pecado original" que a sus ojos tiene este Ejecutivo "ilógico" y que es precisamente el pacto con unos socios que son "insaciables" y "antagónicos", que plantean cuestiones que van a "tener un coste para el conjunto de los españoles".
A ello hay que sumar las elecciones catalanas, en las que "probablemente" se repitan los últimos resultados y la situación sea "similar" a la de anterior convocatoria. Y todo eso hace pensar a Revilla acerca de la "longevidad" del Gobierno: "Tiene una vida no muy larga", ha augurado, a la par que ha considerado que la petición de "regeneración" de Sánchez "es más un deseo" que lo que se va a encontrar.
"Sin presupuestos y sin la pérdida de ansiedad petitoria de estos partidos que están de socios, va a ser muy difícil gobernar", ha vaticinado Revilla, antes de aludir a las manifestaciones reiteradas de los socios acerca de "que tienen al Gobierno agarrado de sus partes nobles" y que "no van a dejar de seguir pidiendo cosas que no se pueden conceder. Esto, a la larga, tendrá un momento que explotará", ha concluido.
