No fueron precisamente buenos augurios los que lanzó recientemente el Ministro de Economía chileno cuando manifestó, previo a los últimos avatares: no alcanzaremos nuestros objetivos climáticos a menos que tengamos unidad y cooperación a escala mundial para combatir el cambio climático, qué es una amenaza existencial para todos nosotros.
Cuando a la unidad de los países la sustituye la desunión, diversidad o pluralidad, y la cooperación se convierte en ignorancia e indiferencia, todo pasa a convertirse en dramas personales a través de “enriquecimientos injustos” y “correlativos empobrecimientos de la sociedad”, significando vulnerabilidades de todo tipo, tanto hacia actuales como próximas generaciones.
Cuando a la unidad de los países la sustituye la desunión, diversidad o pluralidad, todo pasa a convertirse en dramas personales a través de “enriquecimientos injustos”
Es lo que ha traído el “establishment” del petróleo con su influencia en la sociedad y su control de un órden económico determinado, así como el más absoluto desapego al daño producido y desprecio por el medio ambiente en las poblaciones, garantía de supervivencia.
Tampoco inspira mucha confianza las llamadas “Reuniones de Segmentos de Alto Nivel”, que tienen lugar en la COP-25, probablemente con instrucciones limitadas y encontradas.
Pero es que se trata de niveles de contenidos distintos en los que el petróleo siempre se encontrará arriba del agua.
Continuamos prestando atención a aquellas Reuniones con protagonistas y título sugestivo como por ejemplo una convocada para el martes 10, por la OCDE y ONU: LA RESPONSABILIDAD EMPRESARIAL CARA A LA EMERGENCIA EMERGENCIA CLIMÁTICA, pero son muchas ya las decepciones acumuladas.
De aquí a 100 años, nuestros descendientes probablemente contemplarán vía satélite imágenes trucadas del Planeta Tierra
Mucho nos tememos que los esfuerzos que se despliegan por los científicos y expertos no resulten suficientes, cara al sistema y solamente alcancen mínimos disfrazados por el “establishment” como suficientes éxitos.
Probablemente asistamos antes de la próxima reunión de Glasgow a unos cuantos más “actos de constricciones medio ambientales” similares a la vergüenza y la angustia por dejar perder glaciares; soporta cada vez más olas de calor; inundaciones, etc. pero de aquí a 100 años, nuestros descendientes probablemente contemplarán vía satélite imágenes trucadas del Planeta Tierra, indicándonos: “not problems”, y la población del Planeta diezmada.