'Walking Life' es el nombre de la última exposición del artista Okuda San Miguel y la primera del recién inaugurado Museo Gran Vía 15, un espacio consagrado al arte contemporáneo y sus nuevos movimientos, situado en lo que era la mítica joyería Aldao de Madrid.
Con esta instalación artística, el artista cántabro invita a los visitantes a vivir su obra desde dentro y muestra un mundo surrealista donde el color, las estructuras geométricas, el sonido y las instalaciones audiovisuales conectan la imaginación con lo físico.
En declaraciones a Europa Press Televisión, San Miguel ha explicado que su exposición "es una experiencia de arte que te invade", "una especie de paseo que retrata varios de los momentos puntuales de retroalimentación cultural e inspiración que recibo del mundo".
En palabras del propio artista, "Walking Life" propone un recorrido artístico con el que invita a reflexionar sobre los caminos que la vida nos ofrece y los que elegimos tomar en el cambiante contexto en el que vivimos con la intención de que "salgan después de ese camino con la mente llena de color y sobre todo llena de inspiración". Y es que el color y las calaveras, "mi icono más reconocible", son algunas de las notas destacadas de esta muestra, "el color representa todas las razas y culturas y al final todas las banderas", ha explicado San Miguel.
La muestra está dividida en seis zonas interactivas en las que trata de mostrar cómo el arte puede llegar a cambiar nuestras vidas e invita a reflexionar a los visitantes sobre las relaciones que establecemos con la gente que nos rodea, cómo nos afecta la cantidad de información que recibimos, o sobre conceptos como la herencia cultural o el origen común de la humanidad, reinterpretando la cueva de Altamira, "la cueva hace referencia al lugar de dónde vengo, a Cantabria, de alguna es la prehistoria y el futuro", ha indicado San Miguel.
La zona más especial para el artista porque "es el corazón de todo", está en el sótano, en lo que era la caja fuerte de la joyería Aldao, "aquí hay desde antiguos bocetos y dibujos míos hasta colaboraciones con una niña que va en silla de ruedas, o con Desirée Vila la atleta que perdió una pierna o el jugador de hockey Álvaro Negrete", en un intento de mostrar "como el arte puede cambiar vidas o espacios".
