La Policía de Santander ha denunciado a siete hosteleros y a catorce responsables de viviendas de la ciudad durante el fin de semana, por ruidos por fiestas, música elevada o incumplir el horario de cierre.
En concreto, el viernes denunciaron un establecimientos de la calle Ojancano, a las 23:40 horas, por música alta, molestias al vecindario, no tener visible el cartel anunciador de licencia o carecer de hojas de reclamaciones; en Daoiz y Velarde, a las cinco de la madrugada, por incumplir el horario de cierre y ejercer actividad de cocina sin licencia; y en Santa Lucia, cinco minutos después, por los mismos motivos que el anterior y no presentar además licencia de apertura.
Ya el sábado, en esta calle denunciaron a una hostelera a las 00:35 horas por no tener hojas de reclamaciones; a la 1:40 horas en Emilia Pardo Bazán, por tener la música alta, las puertas abiertas y causar molestias a vecinos; a las 2:00 horas en Floranes, también por música y molestias, además de no presentar licencia y carecer de hojas de reclamaciones; y cinco minutos después en Vargas por música y molestias, no presentar la licencia y tener clientes consumiendo en el interior del local sin licencia para ello.
Los policías también denunciaron a los responsables de 14 viviendas en diferentes calles de la ciudad por molestias de música y voces elevadas por la celebración de fiestas, perturbando el descanso de los vecinos, así como el responsable de un local idénticos motivos. Finalmente, interpusieron 44 denuncias por consumo de alcohol en la vía pública.
