Podría aludirse aquella frase: La tónica de la situación es de levedad, sin delicadeza informativa real, como si se tratara de un misterio en que se ve envuelto nuestro Consistorio.
A tenor de los comportamientos, tenemos la certeza que durante un tiempo estaremos sujetos a enmascaramientos del virus, y las soluciones procedentes de la ciencia, llegarán a medida, como ya hemos manifestado en otras ocasiones, vayamos descubriendo las cartas del enemigo.
A la situación actual también hemos llegado a través del clásico “tirarse piedras” de unos a otros, siguiendo el ejemplo de un gobierno actual culpando a otro anterior, lo cual no es novedad, siempre que el electorado y sus bolsillos se encuentren en medio de ambos.
La “aritmética parda” de la U.E. con las vacunas
El Consistorio debe tomar buena nota para una mejor disposición hacia los contribuyentes, ya que el problema, no únicamente en nuestra capital, se identifica plenamente con una de las situaciones típicas en algunas Corporaciones: “dejar en reposo indefinido”, actuaciones efectivas contra la insalubridad.
El total de casos por Covid-19 en EEUU supera al de Europa en casi el doble: 30 por cada 100.000 habitantes contra 16.
Aún después de 20 años de guerra, sus altos costes principalmente para EEUU; equívocas políticas exteriores, vergüenzas y culpabilidades, existen demasiadas implicaciones para Occidente para verse sorprendida a estas alturas por ese tipo de exigencias.
Bajo nuestro punto de vista occidental, realmente inaudito intentar aferrarse al fuselaje de un avión de transporte militar, que finalmente elevó el vuelo con su trágica carga, pero no para afganos, que, como otros muchos en el planeta, desgraciadamente, han nacido para sufrir.
Nos obligan a poner la lavadora, y otros electrodomésticos a costa de nuestro descanso nocturno y fines de semana; a elaborar comidas y cenas, previamente a las 14:00 y 22:00 horas, con lo cual el sistema familiar de vuelta a casa y hacer frente a las tareas domésticas antes de irnos a la cama, se nos resquebraja, además de salirnos por un pico, y riesgo de alterar aún más la paz familiar.
Sin ánimos de entrar en especulaciones, se podría considerar que determinados protagonismos sobre decisiones en su círculo íntimo de colaboradores, hayan oscurecido, o no supieron transmitir sus ideas, perjudicando con ello su política durante los últimos tiempos.
Me comentaba una de nuestras fuentes: mira Jesús, nos encontramos ahora mismo como si se tratara del inicio de un primer día de clase de Primaria, una especie de adhesión a un “ideario” financiero creado por la U.E. a fin de salir del atolladero.
España se debate actualmente alrededor de la famosa frase "¿Cañones o Mantequilla?", en cuanto a maximizar las menores penurias, extrapolando Turismo-Ocio, en contraposición a continuar con las líneas de sacrificio ya puestas en prácticas y de sobra conocidas.
Parece que una vez acreditada su efectividad, queda en el horizonte comprobar otro desafío: la compatibilidad de posibles alternancias en el ser humano de futuras vacunaciones.
Lo que parece claro al dispararse su uso durante la fase pandémica, junto a otras medidas profilácticas, han supuesto el bloqueo o freno a la propagación de contagios o transmisiones como el llamado rinovirus, o vulgarmente denominado: “catarro común”
La situación de crisis de todo tipo que atraviesa Marruecos, sirve de catapulta de problemas y extorsiones permanentes hacia España, que desde hace tiempo adopta políticas de paños calientes hacia un Reino Alauita insaciable
Dichas elecciones supondrán para muchos un tipo de “test” cara a las próximas generales y el futuro del Sr. Sánchez, si no le salvan los Fondos Europeos por llegar, ante lo que supondría una administración errática de los mismos.
Volvemos a encontrarnos dependiendo de las Farmacéuticas; de los Gobiernos; de Políticos, con diversidad de opiniones y acciones, en una situación cada vez mayor, no de desconfianza, la cual abunda, sino de auténtico temor ante una Europa a la deriva.
No parece que la logística de la Unión Europea acabe de controlar los ritmos de producción, destino y suministro de las vacunas producidas en territorios de los 27, debiendo vigilar más de cerca las autorizaciones de exportaciones.
La actual pandemia, una vez extendida, ha constituido en 2020 uno de los escasos motores de aceleración en este sector en España con una previsión de crecimiento para 2021, entre un 20-25%, debido a presencias permanentes y no de carácter vespertino-nocturno, como era la costumbre.
Los países ricos, ofrecerían a los menos afortunados una amplia oferta de todo tipo, eso sí, dentro de un menú tecnológicamente avanzado consistente en una amplia cesta para potenciar el crecimiento en medioambiente, transición ecológica y digital, sin despreciar el crecimiento económico de cuantos más mejor.
Atendiendo a la ONU, y según el Derecho Internacional, Catalunya nunca se ha encontrado “colonizada”, por España, ni tampoco ha existido como potencia colonizadora.
Las condiciones de negociación dadas las circunstancias, y probablemente conocidas de antemano por los firmantes, no permitían ningún rango de igualdad entre las partes para cualquier negociación.
Cuando se suspenden vacunaciones previstas en primeras y segundas dosis en algunos hospitales y se señala el nombre de PFIZER, significa que algo está ocurriendo.
Podría decirse, sin ánimo peyorativo, que se trata de un contrato basado en la disponibilidad de un “dominio” extraído de la ciencia.
Ya no se trata de contemplar las cifras de afectados que se asientan por el Mundo, tan sólo de volver a pensar en que hemos desandado el inicio del camino antaño emprendido y que aparentemente nos puso alas de falsa confianza.
El populismo en turba, con cuatro muertos, se une a los efectos de la pandemia.
Se inicia el pago de una deuda moral contraída con nuestros ancianos ubicados en residencias geriátricas
España siempre ha sido un País muy generoso con sus Monarcas, y podría serlo una vez más, en esta ocasión con el Rey Emérito, sobre todo, porque nunca ha sido una nación vengativa, y afortunadamente, no recuerdo a mi País con esa abominable condición humana.
El impago de la deuda española supondría extender como refugio la vivienda paterna como solución de pervivencia a las dos próximas generaciones.