La localidad cántabra de Silió, en el municipio de Molledo, acoge este domingo, 8 de enero, la fiesta La Vijanera, Bien de Interés Cultural (BIC) Etnográfico de carácter Inmaterial y primer carnaval del año en Europa. La celebración, que conmemora el solsticio de invierno, se recupera tras los dos años en que tuvo que ser suspendida por la pandemia del coronavirus.
Esta mascarada ancestral se celebra el primer domingo siguiente a la festividad de Reyes como rito de despedida del año viejo y bienvenida al nuevo. Se trata de la única mascarada de España que aglutina todos los rituales de casi todas las fiestas de España, un evento que cada año acoge a más visitantes.
La Vijanera es una fiesta de origen pagano que se recuperó en los años 80 y desde entonces ha vivido un gran auge. Es la primera mascarada de invierno de las que se hacen en el norte de España y en Europa, y abre el ciclo con personajes que cuentan cada uno con su identidad y personalidad.
En la mascarada participan cientos de personas ataviadas con trajes distintos, muchos de ellos dedicados a la naturaleza, e interpretan a alrededor de 60 personajes, entre ellos 'la madama', 'el mancebo', 'los trapajones', 'el oso' y 'su dueño', 'el pasiego', 'el caballero', 'la Pepa' o 'Pepona', 'el médico', 'el domador', 'el húngaro', 'el viejo' y 'la vieja', vestidos de manera vistosa.
La jornada comienza con el toque de los campanos por el pueblo y prosigue con la salida de los vijaneros por las calles del pueblo. Otros momentos importantes de la jornada son la captura del oso, la defensa de la raya, la muerte del oso y las coplas, en las que se trata de hacer crítica del año que acaba de finalizar.
También tienen una presencia destacada las pandereteras de valle y numerosos músicos tocando de forma libre por distintas partes del pueblo con el objetivo de recrear el ambiente de las vijaneras antiguas.
